Viajar a Antofagasta de la Sierra genera la sensación de estar cerca del cielo. La altura impacta. La villa principal está aproximadamente a 3500 metros sobre el nivel del mar, y los distintos atractivos turísticos que son paisajes naturales de otro planeta, a los que se puede llegar solamente con guía local y en vehículos 4x4, alcanzan hasta los 5.000 msnm.

Este lugar de la puna catamarqueña cuenta con más de 200 volcanes inactivos y la lava petrificada de color negro es protagonista en gran parte del territorio. A 8 kilómetros del pueblo se encuentran dos importantes volcanes: el Alumbrera y el Antofagasta, este último con un cráter en la cima al que se puede ascender en una salida de trekking de media dificultad con un guía local.

Hay otro encanto en ese paisaje y son las piedras campana, similares al color de la lava petrificada, que al golpearlas generan ese sonido. Están en el camino hacia Carachi Pampa donde se encuentra el volcán que le da nombre al lugar y una laguna rodeada de un paisaje similar a un cuadro pintado con acuarelas. Siguiendo el mismo tramo, se llega al Campo de Piedra Pómez, un terreno de 25 km repleto de roca blanca, a más de 3.000 msnm, resultado de la actividad volcánica con formaciones que superan la imaginación.

A este lugar, considerado uno de los desiertos más increíbles del mundo, también se puede llegar desde el pequeño pueblo de El Peñón, en Antofagasta de la Sierra. Ese paisaje espacial además tiene a las Dunas Blancas, un terreno árido con rocas cubiertas por arena debido a la acción del viento.

Otro de los atractivos que dejan sin aire por el sorprendente paisaje es el salar de Antofalla, un enorme desierto de sal que se extiende por más de 160 km, y por esa longitud es considerado el más largo del mundo. En su interior se encuentra Laguna Verde y distintas lagunas de colores y pozos de agua.

En Antofalla la maravilla continúa en el tramo hacia el paraje de la Vega Botijuela. Es que, entre volcanes y el salar más largo del mundo se encuentra a 4200 metros de altura un “geiser termal”, al que custodia Simón Morales, único habitante, quien administra y protege el lugar.

Geografía para el asombro

Otra excursión que asegura aventura extrema es la del Volcán Galán. Una recomendación, antes de emprender el recorrido, es tomar té de coca o pupusa, un yuyito que los lugareños aseguran previene el mal de altura o apunamiento. Además, es importante ir acompañados por guías locales y habilitados que garanticen que la visita sea segura, es que esta es la excursión más exigente por el tiempo que demanda realizarla y por la variación de la altura que parte de los 3500 y alcanza los 5000 msnm.

El recorrido atraviesa Campo Las Tobas donde se pueden observar petroglifos, continúa por el Cañón y la Quebrada Real Grande, donde los conductores de los vehículos con tracción 4x4 más avezados harán vivir la experiencia con más adrenalina al trepar caminos de alta dificultad. El paisaje cambia permanentemente con las tonalidades de los colores, las texturas de los paisajes de rocas, dunas, y lo más maravilloso en las vegas donde se observan las poblaciones de vicuñas en las vertientes de agua de deshielo. 

En la cima del Volcán Galán comienza la aventura al llegar a los 5000 msnm para luego ingresar al cráter, que mide 42 km de diámetro y el cual por sus dimensiones es considerado el más grande del mundo. En su interior se encuentra la Laguna Diamante, y la Laguna Grande donde se pueden apreciar parinas (aves similares a los flamencos rosados), distintas fumarolas de 86°C. y vicuñas y zorros que conviven entre volcanes nevados.

Antes de viajar se recomienda realizar la reserva del alojamiento debido a la alta demanda de visitantes en la temporada más visitada que suele ser de septiembre a abril, periodo en el que se observan parinas en las lagunas. 

Para más información puede consultarse en la cuenta oficial de Instagram y Facebook de Turismo Catamarca y en la página web turismo.catamarca.gob.ar