Accidentado triunfo de Del Potro sobre Nishioka.
La batalla política encarnizada sigue siendo “la fórmula ganadora”. Los candidatos no escatimaron en chicanas desde que llegaron.
Un analista vernáculo (Torres Zuccardi) y otro foráneo (López Calendino) desmenuzaron las exposiciones de los contendientes.
Nadie se atrevió a jugar la carta de la “primera impresión”, a la construcción del propio estilo.