Por Carmen Perilli

Para LA GACETA - TUCUMÁN

Roberto Bolaño se convirtió en el escritor faro de las últimas décadas del siglo XX y los comienzos del siglo XXI. Su obra renovó el modo de ver la literatura, sacudiendo a sus contemporáneos. No sólo fascinaron los libros sino también la trágica figura del autor. Una suerte de enfant terrible, lector y escritor voraz, que intentaba dinamitar la literatura latinoamericana y nos dejó obras que nos marcaron. Una dura enfermedad lo llevó a una muerte temprana que incrementó la potencia mito.

Vivió en Chile hasta los 15 años, luego en México y, por fin, se instaló en Cataluña. Una de las preguntas centrales de sus obras se refiere al lugar de autor y a las difíciles relaciones entre estética y poética. Su exploración se amplía a los diálogos posibles entre escritura y violencia y se dice siempre desde la fe en la literatura, una fe que es una rareza en el horizonte de época.  Sin embargo, se trata de un” planeta de los monstruos” permite hacer “un muestrario variopinto de psicópatas y esquizofrénicos…los escritores bárbaros”. El escritor/personaje puede ser entidad mitológica, como aparato cultural puede ser un criminal, un infame de los que pintaron Schwob y Borges.

Se arma una genealogía en los malditos, evocado en su libro de poemas Los perros románticos. Ataca a los consagrados como Paz, Vargas Llosa, García Márquez, etc.; se ensaña con escritoras como Isabel Allende y Marcela Serrano a las que denomina escribidoras. Todo es extremo en este   narrador- que también produjo poemas- pero, sobre todo, novelas.

El material de Bolaño fue la historia literaria latinoamericana. La ficción autobiográfica es el espacio desde el cual construye múltiples biografías Si La literatura nazi en América es un muestrario de escritores viles, Monsier Pain se concentra en los últimos días de un César Vallejo con el que se hermana en el dolor, Estrella Distante propone una feroz parodia.  La historia de un escritor chileno reconocido, delator y nazi, que escribe en el cielo, pero también con las imágenes de cuerpos desaparecidos y torturados. Nocturno de Chile transcurre en una suerte de casa del terror donde se realizaban tertulias con creadores como Neruda y Parra mientras los servicios torturan, de modo clandestino, en los sótanos.

Sus grandes obras Los detectives salvajes y 2666 abordan la cultura de la violencia, mostrando los lazos entre presente y horror. En la primera se centra en dos amigos, Ulises Lima y Arturo Belano que persiguen una mítica poeta del estridentismo. 2666 se desarrolla en cinco libros donde los críticos persiguen una ambigua silueta de autor, Benno Von Archimboldi. A lo largo del texto se abordan el nazismo, el estalinismo y el violento presente del narcotráfico. Sólo la última parte contiene la historia de Reiteró/ Archimboldi que permanecerá desconocida.

Uno de los personajes de Bolaño afirma que los escritores mexicanos corren el peligro de perder su sombra: “Lo cierto es que tu sombra se pierde y tú, momentáneamente, la olvidas. Y así llegas, sin sombra, a una especie de escenario y te pones a traducir o a reinterpretar o a cantar la realidad”. A 20 años de su muerte todavía nos sacude su enigmática obra, rodeada por la polémica acerca de la herencia y la aparición de numerosas obras póstumas.

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Carmen Perilli - Doctora en Letras. Especialista en Literatura latinoamericana.