Tucumán corazón de Argentina, jardín del universo, tierra fecunda de la eterna primavera, testiga de sueños e ilusiones sudaméricanas que hace 207 años germinaron con esperanza el 9 de julio de 1816, floreciendo en pleno invierno los laureles en casa de Doña Francisca Bazán de Laguna, fusionándose el grito sagrado de Libertad junto a todos los congresales de las Provincias Unidas. Tucumán, cuna de la Independencia argentina, que con el tiempo y sus aires patrióticos inspiró a hijos como Juan Bautista Alberdi para escribir las Bases y puntos de partida para la organización política de la República Argentina. Tucumán, tierra ardiente, fuerza del cañaveral, nostalgia del pelador, llevas savias dulces, fragancias de azahares; en tí reinó la libertad del pájaro y la flor. Pero hoy los excesos de libertad se convirtieron en libertinaje; por aprender a vivir de memoria, fácilmente, sin enfrentar las verdades ni valorar las vivencias, olvidando las dos puntas de la humanidad, el niño y el anciano. El hombre tiene su derecho fundamental de convivir con la democracia, la paz, la solidaridad, la justicia social y el bien común, procurando el desarrollo económico, educativo y sanitario. Tucumán, es hora de recuperar e imitar los esfuerzos de nuestros antepasados. Tengamos orgullo de ser tucumanos.
Pedro Pablo Castaño
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