Altaneros se emancipó de Tangueando, para ampliar sus horizontes a otros géneros de la música popular latinoamericana. La transición comenzó hace ya varios recitales, pero el nuevo nombre acortado del trío que integran el guitarrista Carlos Podazza y las cantantes Ana Marcilla y María José Soldati se formalizará esta noche, cuando desde las 22 se presente en el teatro municipal Rosita Ávila (Las Piedras 1.550).

Pero para que quede claro que no hay ruptura con el 2x4, en el repertorio habrá tangos; además estará integrado por candombes a tres voces, música rioplatense y afroamericana y un popurrí de sorpresas. Como invitados estarán Cecilia Paliza, Fernando De la Orden y Sofía Ascárate.

“Nos vamos a llamar solamente Altaneros desde ahora porque modificamos el repertorio, porque queríamos un nombre un poco más abarcativo y que contemple otros ritmos, que si bien tienen el mismo compás que el tango, es más amplio”, señala Podazza.

- No hay ruptura, sino una ampliación.

- Nos estamos permitiendo hacer temas del folclore argentino y norteño, con canciones escritas en un compás afín al del tango. Vamos a hacer incluso un tributo a Sandro y a fusionar rtimos colombianos con el tango, irnos a la música tipo salsa, en un juego que nos proponemos, con un recital que tendrá una puesta en escena especial para aprovechar todos los elementos que disponemos en un teatro. Habrá varias sorpresas para quienes nos vayan a ver.

- ¿Quiénes los acompañarán en el escenario?

- Vamos con una banda simple de guitarra mía, flauta traversa con Carla Guzmán y percusión con Marcos Martínez, con quienes haremos el sostén de la banda. Con estos instrumentos buscamos definir la sonoridad del grupo en este nuevo proceso, que nos identifique. La flauta enriquece con la dinámica que le da a los temas, sumando lo que hacen las cuerdas. Estará como invitado Francisco Santamarina, un gran amigo y compañeros con quien despuntaremos algunas locuras desde nuestras guitarras.

- ¿Qué implica trabajar con dos cantantes?

- Utilizar el recurso de las voces es una manera de evitar sumar más instrumentos. Lo que hacen Ana y María José tiene un protagonismo muy importante, ya que se trabaja mucho en los arreglos desde las armonías y las melodías para destacar sus talentos.

- ¿La negritud es un eje fundacional común de la música de la región?

- Sí, todo el repertorio que abarcamos está escrito en cuatro tiempos en lo rioplatense (tango, milonga y candombe), y también la cumbia colombiana y los vallenatos tienen ese origen, que junto con la chacarera, el landó y el joropo están en tres tiempos, que no interpretamos esta vez. Nosotros abarcamos los compases pares.

- ¿Cómo eligieron a sus invitados para este show?

- Creemos que los tres (De la Orden, Paliza y Ascárate) son referentes de los artistas tucumanos, pasaron por muchísimos grupos y se desarrollaron como solistas. Convocarlos es una manera de agradecerles su presencia en los escenarios y que nos dejen tan bien representados a donde van a actuar, sea dentro como fuera del país. Es importante lo que hacen y una linda forma de compartir la música con gente querida y humilde.

- ¿Hacia dónde evolucionará Altaneros?

- Investigaremos más la forma de enriquecer el repertorio, e incursionando en canciones propias que estoy componiendo para poner en valor las composiciones que no siempre se difunden, porque es más fácil hacer lo conocido.