La diputada Rossana Chahla (Frente de Todos -FdT-) comenzó a medirse el traje de intendenta de San Miguel de Tucumán. Su certeza -y la de dirigentes y militantes del FdT- estriba en la suma de los guarismos del conteo provisorio, difundidos entre la noche del domingo y la madrugada del lunes, y las cifras que arrojó el escrutinio definitivo de las 203 urnas que no se habían contabilizado en aquella ocasión.
De acuerdo a esa operación matemática, en efecto, la ex ministra de Salud de la provincia resultó ganadora por 5.281 votos de diferencia por sobre su inmediata perseguidora, la postulante por Juntos por el Cambio, Beatriz Ávila. Esto sale de adicionar los 128.240 votos para Chahla del conteo provisorio con los 25.445 que surgieron para ella de las 203 mesas que restaban contabilizar. Eso da un total de 153.685 sufragios. La senadora de la oposición, en tanto, acumulaba 126.241 adhesiones en el escrutinio difundido tras la votación; a esas se suman otras 22.163 que resultaron de las urnas escrutadas por primera vez, lo que da un total de 148.404.
Aquellas mesas se contaron entre el martes y ayer a la mañana. Algunas horas después, las autoridades de Juntos por el Cambio -particularmente, las que integran el espacio liderado por el actual intendente de la Capital, Germán Alfaro- decidieron dejar de fiscalizar el conteo legal para las categorías de gobernador y de jefe municipal de San Miguel de Tucumán. Además, repudiaron la resolución de la Junta Electoral de Tucumán (JET), mediante la cual se rechaza el pedido de Alfaro de que se abran todas las urnas de este distrito.
Pese a la ausencia de estos fiscales, el escrutinio definitivo prosiguió sin inconvenientes durante la tarde de ayer, según el cronograma que oportunamente había determinado la JET: primero, la totalidad de las mesas de la sección electoral Capital. En la mayoría de los casos, se cotejan las actas y los certificados guardados dentro de las urnas -firmados por las autoridades de mesa de los comicios del domingo- con la documentación de los fiscales. En muy pocos casos se contaban los votos; e incluso solo para algunas categorías.
Desde cero
En escrutinio definitivo hace esta operación con la totalidad de las urnas de la provincia. Para ello, “vuelve a cero” el conteo provisorio; es decir, no lo continúa. Ello implica que durante el lapso que demore la revisión de las mesas, volverán a verse los movimientos de los guarismos, que se habían dado durante la noche del domingo y la madrugada del lunes. Por ejemplo, precisamente en la categoría Intendente de San Miguel de Tucumán, el escrutinio definitivo de las 378 urnas que se llevan revisando -las 203 que se habían visto hasta la mañana de ayer, más las que se siguieron escrutando durante la tarde- mostraba una gruesa ventaja de Ávila por sobre Chahla: 48.526 votos para la senadora de Juntos por el Cambio, frente a 37.114 para la diputada.
Según explicaron fuentes cercanas a la JET, esto era así porque se había comenzado el recuento por circuitos muy afines al alfarismo. Con el correr del trámite, se verá cómo Chahla va acortando la diferencia, hasta que finalmente supere a Ávila por los 5.281 votos que se mencionan renglones arriba. De hecho, las 378 mesas representan un 28% de las 1.350 que corresponden a esa sección.
Cabe señalar que se están contando las cuatro categorías: Gobernador, Intendente, Legislador y Concejal por la Capital. Pero la atención se centraba, al menos hasta ayer, en la puja entre Chahla y Ávila.
Igualmente, para la oficialización del resultado -y la consecuente proclamación de los electos- habrá que esperar que finalice el recuento de los votos. Las tareas continuarán mañana, entre las 8 y las 20; y el sábado, hasta el mediodía. El domingo, Día del Padre, se descansará.