Ante la actual oferta laboral que ofrece el país, el extranjero se convirtió en una opción interesante para muchas personas que buscan su crecimiento laboral y personal. Sin embargo, migrar no es fácil y demanda tener una ciudadanía ya sea europea o de un país de otro continente. La italiana, por ejemplo, no tiene límites generacionales y por esta razón tiene una gran demanda.
Si bien hay quienes logan acceder al documento internacional, otros no lo consiguen a pesar de cumplir con todos los trámites necesarios. Ahora se dio a conocer la lista de apellidos que tienen más chances de obtenerla.
Los descendientes de inmigrantes italianos en el extranjero tienen el derecho fundamental de acceder a la ciudadanía italiana Jure Sanguinis, que tiene que ver con el derecho de sangre: la posibilidad de tener la ciudadanía en virtud de la descendencia de un antepasado de ese país europeo.
Qué apellidos componen la lista para acceder a la ciudadanía italiana
La lista incluye a varios apellidos que fueron aprobados por la norma y que les da más posibilidades de recibir la nacionalidad italiana. Son los siguientes:
Abate, Abà, Labate, Abatino, Abatantuono, Abaterusso, Abaticola, Achilla, Achille, Achilleo, Achillini, Chiletti, Chiloni, Chilesotti, Anes, Anesin, Anesini, Annes, Annesi, Annesin, Deanesi, De Anesi, Bianco, Bianchi, Dal Bianco, Bianchini, Bianchetti, Biancone, Lo Bianc, Bottari, Bottarelli, Bottarini, Bottarin, Bottaro, Espósito, Espositi, Degli Sposti, Fiore, Di Fiore, Fiorelli, Fiorucci, Fiorio, Fioribello, Flores, Giovannetti, Di Giovanni, Della Giovanna, Giannelli, Giannoli, Giani, Giannelli, Giannetti, Da Rossa, Lo Russo, La Russa, Larossa, La Russa, Larussa, Larossa, La Rossa, Natale, Natali, Natalino, Nalato, Nadali, Nalesso, Nadin, Ricci, Riccio, Rizzi, Rizzo, Rizza, Rizzati, Risso, Lo Riccio, La Riccia, La Rizza, Ricciuto, Sorace, Soraci, Surace, Suraci, Soracca, Soracchi, Soracco, Zanella, Zanoli, Zannier, Vani, Vannucci, Vannicelli, Vanno, Vani, Vanetto.
Luego de que el aspirante cumpla con los requisitos para recibir la documentación, es necesario que resida en Italia al menos durante tres años. En algunos casos, hay quienes logran obtener la doble ciudadanía italiana, que les permite a acceder a más beneficios en Europa.