Una historia de amor que terminó en ruptura y una mujer despechada son los hilos de la investigación por una amenaza de bomba en un avión de Aerolíneas Argentinas. El juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villena, le tomará hoy indagatoria ala azafata acusada por la amenaza de bomba en un vuelo a Miami. Los cargos en su contra son intimidación pública, entorpecimiento de los servicios públicos y coacción agravada. ¿Fue una venganza por despecho?, es el interrogante de los investigadores.
Aerolíneas Argentinas: por una amenaza de bomba, que demoró un vuelo a Miami, detuvieron a una azafataSe supo que había un ex novio dentro del avión y la mujer cometió un error que permitió identificarla. Esta es la trama detrás de la detención de la azafata de Aerolíneas Argentinas. Daniela Carbone, azafata de Aerolíneas Argentinas, de 47 años lleva 25 en la empresa estatal.
Evacuaron un avión de Aerolíneas Argentinas con destino a Miami debido a una amenaza de bombaSospechan que usó el teléfono de su hija para enviar los audios intimidatorios a sus compañeros de trabajo. Su separación de un tripulante que iba en aquel avión y el destino del vuelo son los ejes de la trama judicial.
¿Fue una venganza por un corazón roto?
Las sospechas comenzaron a crecer en los últimos días. La investigación busca determinar por qué una azafata amenazó con la existencia de una bomba que iba a explotar en un vuelo de Aerolíneas Argentinas.
El avión estaba por despegar rumbo a Miami y el llamado de la mujer provocó pérdidas millonarias. La mujer fue instructora en la escuela de azafatas. Según trascendió, la mujer estuvo cinco años de novia con el azafato que iba en el vuelo que recibió la amenaza.
El hombre la había dejado hace poco. Una versión dice que estaba viéndose con una otra empleada o que iba a encontrarse con su nueva pareja en Miami. Lo cierto es que la mujer tomó el control del teléfono de su hija, le puso un chip prepago y llamó para hacer la amenaza.
¿Qué decía la amenaza de bomba?
El hecho ocurrió el domingo 21 de mayo a la mañana, en el aeropuerto internacional de Ezeiza, cuando se preparaba la partida a las 7.35 del vuelo “AR1304 Ezeiza-Miami”. En la aeronave iban 270 pasajeros y 12 tripulantes.
“Decile al capitancito que le pusimos tres bombas en el Miami. Que se deje de joder con la política y chequee el avión porque van a volar en mil pedazos”, se oyó el mensaje con la voz distorsionada.
¿Cómo reaccionaron en el avión?
En ese momento, se activó el operativo de protocolo de seguridad para controlar que no hubiera explosivos. Como consecuencia de la amenaza, el avión postergó siete horas su partida.
Debido a esa complicación, a la empresa Aerolíneas Argentinas le costó una cifra que rondó el millón de dólares. El fiscal Sergio Mola junto al personal de la división Antiterrorismo de la Policía de Seguridad Aeroportuaria tomaron el caso.
La causa quedó bajo secreto de sumario para llevar adelante distintas diligencias. Por estas horas, el juzgado interrogó a la tripulación, escuchó al piloto y ordenó el análisis de las comunicaciones.
¿Qué error cometió la azafata?
Un detalle que llamó la atención fue que todo el tiempo hay amenazas en el aeropuerto, pero el teléfono al que se había hecho la de aquel día no era un número fácil de conseguir. Otro indicio que le permitió a los detectives orientarse fueron las formas. “Se notaba que era una persona que conocía la actividad aeroportuaria”, dijeron en tribunales.
El piloto es el hijo de Jorge Alberto Pérez Tamayo, quien estuvo al frente del sindicato de pilotos (APLA), pero no estaba participando de actividad política sindical. La advertencia sobre “que se deje de joder con la política” hizo pensar en un conocimiento del mundo interno de los ocupantes de la tripulación.
En otro de los mensajes, la azafata advertía que conocía el colegio donde iban los hijos del piloto, por eso la figura de coacción agravada. Las sospechas, sin embargo, apuntan a que poner en foco al piloto fue una estrategia de la acusada para encubrir la razón del verdadero destinatario del mensaje. “Así como distorsionó la voz, también apuntó hacia otro. Buscó confundir”, deslizaron.
¿Quién es la mujer detenida?
La investigación se centró en la mujer luego de 48 horas de iniciada la causa. La llamada salió del teléfono de su hija, con un chip prepago. La mujer fue detenida al arribar al país en su último vuelo.
La mujer utilizó para las amenazas una voz distorsionada mediante el uso de una web, The Voice Changer, especializada en esos efectos. La Justicia secuestró un Iphone 13 Pro y otro 12 Pro en su domicilio, que habían sido utilizados con la línea identificada desde donde salieron las amenazas.
En uno de ellos, hallaron algunas búsquedas en el navegador Safari de Apple, hechas el mismo domingo 21. "Cómo investigar un audio", "se puede analizar un audio para saber la voz de quién es", "activar reconocimiento de voz", "Aerolíneas Argentinas" y "SAME Provincia", entre las consultas.
¿Dónde vive la azafata detenida?
Carbone fue detenida en Ezeiza, por la Policía de Seguridad Aeroportuaria y a pedido del juez Villena. Los cargos en su contra son "intimidación pública" y "entorpecimiento de los servicios públicos", además de "coacción agravada".
Carbone se presenta como "comisario de abordo en Aerolíneas Argentinas" en sus desactualizadas redes sociales. Rubia, vistosa y coqueta a tono con su profesión,
Capricorniana, nacida en las vísperas de Año Nuevo, en los últimos dos años habría tomado decisiones financieras no previsibles para los que delimitan a los signos: acumularía deudas de las consideradas incobrables por los bancos, con una quincena de cooperativas y empresas de créditos que andarían con intenciones de hacerle pagar.
Además de la hija de 21 años a la que le habría usado el teléfono para impedir un vuelo de su ex, Carbone se dice madre de Mora, "un perro", y Blanca, "un gato". Vive en un barrio privado con exclusivo club de golf de Garín. Se cree que después de un cuarto de siglo, la mujer podría dejar de volar.