En diciembre Céline Dión anunció que tenía una extraña enfermedad neurodegenerativa que le impedía continuar con el normal desarrollo de su carrera profesional. Ayer, los organizadores de su gira “Courage World Tour” anunciaron la cancelación de los shows restantes hasta abril de 2024 a causa de la salud de la cantante en relación a su Síndrome de persona rígida (SPR).

A quiénes afecta el Síndrome de Persona Rígida

La enfermedad neurológica que padece la intérprete de “My heart will go on” es poco frecuente. Según un artículo publicado en 2020 por la Revista Colombiana de Reumatología, “los reportes realizados informan una prevalencia de 1-2 casos por millón, con incidencia de un caso por millón por año”.

Eso, para el caso de los hombres. Para las mujeres, en cambio, hay un promedio mayor de personas que pueden resultar afectadas. “La mujer se afecta más, de 2 a 3 veces en proporción al hombre”, señala el artículo.

Edades afectadas por el Síndrome de persona rígida

De acuerdo al mismo estudio, la enfermedad se presenta entre los 20 y 50 años, variando ampliamente en el rango etario. Sin embargo, según expone el sitio Rare Diseases de información genética y de enfermedades raras, el SPR puede manifestarse entre los 30 y 60 años.

“Se cree que es una enfermedad autoinmune en la que el  sistema inmune ataca su propio sistema nervioso central (cerebro y la médula espinal)”, expone Rare Diseases.

Síntomas del Síndrome de persona rígida

El SPR hace que el sistema inmune ataque al propio cuerpo. Por ello, son característicos los episodios de rigidez muscular en el torso y las articulaciones inferiores y superiores. Entre los síntomas pueden estar presentes:

- Posturas anormales como encorvamiento

- Rigidez muscular y espasmos por sensibilidad al ruido, tacto o sobresalto

- Caídas por espasmos y rigidez muscular al caminar o ponerse de pie

- Parálisis cerebral

- Epilepsia

A su vez, el SPR puede derivar en algunos cuadros de ansiedad o depresión debido a la alta influencia de la enfermedad en las actividades diarias de las personas afectadas, “pero también porque la causa del síndrome se relaciona con niveles bajos de neurotransmisores (que) ayudan a mantener el estado de ánimo de una persona”.