Ahora sí: empezó el Mundial Sub-20 en Argentina. La atmósfera del Estadio Madre de Ciudades, donde la Selección debuta con Uzbekistán, empezó a calentarse cuando la voz del estadio nombró al equipo titular. Los 16°C de temperatura quedaron en segundo plano cuando se escucharon los nombres del director técnico, Javier Mascherano, y de tres jugadores: Valentín Barco, Máximo Perrone y Valentín Carboni. Los más aplaudidos. La terna arbitral, oriunda de Francia, recibió silbidos. Ecos de Qatar.

La ceremonia inaugural comenzó a las 17.37, cuando cientos de hombres y mujeres vestidos de blanco ingresaron al campo de juego caminando mientras cargaban banderas. A lo largo de 20 minutos desplegaron telas en representación de cada una de las 24 selecciones que competirán hasta el 11 de junio en nuestro país.

Durante la coreografía de baile con banderas se escuchó rock (“La argentinidad al palo, canción de la Bersuit Vergarabat), folclore y hubo un show de tango de Mora Godoy que desde las tribunas costó ver por el humo producto de los fuegos artificiales.

Uno de los momentos más emotivos -aunque breve- fue, obviamente, la interpretación del himno nacional argentino por parte de Patricia Sosa, que terminó de encender a un estadio que estuvo colmado principalmente de familias.

Minutos antes del partido, los 30.000 asistentes se unieron con dos cánticos: “El que no salta, es un inglés” y “Argentina, Argentina”. Es el comienzo de la historia para este plantel que busca sumar la “séptima” estrella en esta categoría. ¿Nos volvemos a ilusionar?