La noticia del presunto hecho de violencia escolar en Lules (en el que un docente habría estrangulado a un estudiante) sacudió la provincia y tuvo repercusiones en todo el país. La familia del alumno -de la Escuela Técnica N°1- realizó una denuncia penal y el docente fue apartado de su cargo; en los últimos días, hubo muchas voces que opinaron sobre el hecho: compañeros del curso, padres, exalumnos y hasta la misma institución, mediante un comunicado. Pero en medio de la polémica, faltó la voz de una de las patas de esta historia.
Luis Néstor Véliz es el docente culpado de tomar al estudiante E.J.G. por el cuello hasta que el adolescente perdió la consciencia, el 26 de abril. Luego de la viralización de la noticia, el profesor hizo un descargo por Facebook y se llamó al silencio. Aunque LA GACETA intentó contactarlo para una entrevista, él aseguró que no se siente en condiciones emocionales para hablar. Sin embargo, fue su abogado el que se encargó de defender al acusado. “Es verdad que mi cliente contuvo a E. para que no pelee con un compañero, pero no existió la famosa llave de estrangulamiento, ni descompensación ni convulsiones”, explicó tajante el letrado Pablo Rivera, que fue claro al hablar de su cliente: “psicológicamente está muy mal, afectado por toda la agresión que ha sufrido y por toda la situación”
Recapitulemos un poco. Según relataron compañeros de la víctima a LA GACETA todo comenzó por “un juego de manos”, y se agravó cuando el docente pensó que E. y otro estudiante estaban peleando. “El profe lo agarró del cuello. E. parecía que estaba muriendo; no podía hablar. Cuando lo tenía entre las manos, le dijo a mi compañero ‘si te seguís moviendo te voy a apretar más fuerte’. Después E. cayó sobre una silla, se golpeó y se desmayó. [...] se despertó asustado y sin hablar. Le temblaban la mandíbula y el brazo derecho; se intentó levantar y no le reaccionaban los brazos, entonces se volvió a caer”, contaron.
“Denuncia infundada”
Lo que no sería cierto -remarcó el abogado- es la parte en la que el estudiante se habría desmayado. “Nunca se produjo el desvanecimiento; tenemos de testigos a alumnos y a un docente, que ya han sido ofrecidos a la Fiscalía para que se les tome declaración. Concretamente, este alumno denuncia la agresión, pero se quedó en la escuela; completó su tarea escolar hasta las 12 del mediodía. Nunca pidió ser atendido por ningún médico, ni se solicitó la cobertura del seguro escolar. En la denuncia penal, nunca se presentaron ante el médico forense para constatar las lesiones. Por lo tanto, consideramos que ha sido una denuncia infundada y es eso lo que vamos a hacer valer en la sede penal y en la administrativa”, advirtió.
Recordemos que al día de hoy existen dos procesos: hay una investigación penal en Tribunales por la denuncia que hizo la familia, y en paralelo -luego de haber apartado a Véliz de su cargo- se inició una pesquisa administrativa en el Ministerio de Educación de la Provincia.
Rivera indicó que la idea no es pedir nada “en contra de la familia”, pero que él y su defendido solicitarán el sobreseimiento en la sede penal porque “no ha habido ningún tipo de agresión de tal magnitud que le produzca desmayo o convulsiones, como se dijo”. A su vez, destacó que su cliente “no tiene antecedentes penales ni institucionales, y lo que se hizo (apartarlo) es según el protocolo que hay que seguir -aseguró-; nosotros vamos a ir con pruebas escritas a la Justicia. Si se lo encuentra inocente, tienen que restituirlo en el cargo. Si se lo encuentra culpable, se aplicarán las sanciones que correspondan”.
Más acciones legales
El defensor también realizó un relato cronológico de los hechos para hablar de una segunda denuncia existente. “El incidente sucedió el miércoles. El jueves hubo desinfección y el viernes se produjo otro problema: la familia y padres de otros alumnos se presentaron en la escuela. Hubo incluso padres de chicos que no son estudiantes de Véliz. Empezaron, de forma violenta, a irrumpir las clases que se estaban desarrollando, y comenzaron con agresiones verbales y físicas a los docentes. Todo eso lo tenemos grabado y ya lo hemos presentado”, adelantó. En las redes circularon algunos videos del escrache a Véliz.
Esa segunda denuncia -que ya se encuentra en la Unidad Fiscal de Decisión Temprana, indicó- fue hecha por las autoridades. “La ley 9.010 establece que el delito de una amenaza o lesiones se agrava cuando te presentás en un establecimiento escolar y en forma violenta irrumpís o agredís a un docente”, comentó y dijo: “estamos pidiendo medidas cautelares contra todas estas personas, que ya las tenemos identificadas. Además, vamos a iniciar acciones civiles en contra de las personas que han hecho publicaciones en las redes sociales, difamando a mi cliente. Tenemos capturas; se lo culpó de un montón de hechos en los que no ha participado”.