Jugó un gran primer tiempo, lapso durante el que mostró la mejor versión de este 2023 y se fue al descanso ganando por 2 a 0, marcador que podría haber sido mucho más abultado. Sin embargo, en el segundo tiempo se durmió, el rival lo empató y estuvo a punto de derrotarlo. Y cuando estaba contra las cuerdas y jugaba con un hombre menos, un grosero error le permitió volver a ponerse arriba para conseguir la segunda victoria en la Copa Libertadores. Racing mostró varias caras en el triunfo por 3 a 2 sobre Aucas de Ecuador, por la segunda fecha del Grupo A, del que es el único puntero.
El equipo de Fernando Gago arrancó con todo y en los primeros 10 minutos generó cuatro situaciones claras de gol. Y de tanto buscar, a los 12’ llegó la apertura del marcador. Maximiliano Romero cabeceó un centro de Gabriel Rojas y mandó la pelota al fondo de la red. El 1 a 0 no hizo que la “academia” se relaje. Todo lo contrario, fue por más. Cinco minutos más tarde, Juan Nardoni solo tuvo que empujar el balón, luego de un excelente desborde de Romero.
Jonathan Gómez y Paolo Guerrero perdieron las chances para aumentar y el árbitro no sancionó penal por un golpe al peruano sobre el final de la primera parte.
Todo era fiesta en el Cilindro de Avellaneda. Racing estaba para golear, era líder y el rival parecía que no estaba en la cancha. Pero el complemento arrancó de la peor manera, porque a los dos minutos los ecuatorianos llegaron al descuento por intermedio de Erick Castillo. Y sobre llovido, mojado: Aucas empató en la segunda llegada al arco de Gabriel Arias. La “academia” se durmió, marcó mal en el área y Luis Cangá puso el 2 a 2.
A partir de ahí el local nunca más pudo acomodarse y comenzó a atacar sin claridad. Y encima, a los 32’ se quedó con 10 por la expulsión de “Maxi” Moralez. Racing era un caos y Aucas tuvo la oportunidad de marcar el 3 a 2, pero se lo perdió. Sobre el final, Wilker Ángel cabeceó para atrás y venció a su propio arco, para que Racing sea una fiesta y pase del sufrimiento a la felicidad.