La compra de una gran parte de los depósitos y préstamos del Silicon Valley Bank contribuyó hoy a mantener la calma en los frágiles mercados, perturbados por el temor a una contracción del crédito y una mayor tensión bancaria sistémica.
First Citizens BancShares Inc compró todos los préstamos y depósitos de SVB y dio a la Corporación Federal de Seguro de Depósitos de Estados Unidos (FDIC, por sus siglas en inglés) derechos de revalorización de sus acciones por valor de hasta U$S 500 millones a cambio, dijo la FDIC en un comunicado.
El caso SVBDiecisiete antiguas sucursales de SVB abrieron hoy como sucursales de First Citizens. Esta entidad adquiere unos U$S 72.000 millones en activos de SVB, con un descuento de U$S 16.500 millones y el coste estimado del colapso de SVB para el fondo de garantía de depósitos de la FDIC es de unos U$S 20.000 millones, según la FDIC.
First Citizens, con sede en Carolina del Norte, dijo en un comunicado que no compró otros activos o deudas de SVB Financial Group, la antigua matriz de Silicon Valley Bank.
Las acciones de los bancos se desploman a nivel mundial por el cierre del Silicon Valley BankEl acuerdo ha dado un respiro a los mercados, ya que ha sido el primer fin de semana en varias semanas sin noticias de nuevos colapsos bancarios, acuerdos de rescate o ayuda de emergencia de las autoridades para apuntalar la confianza.
"Silicon Valley pasa a manos de otro comprador"
"Silicon Valley pasa a manos de otro comprador, lo que está bien, pero el problema mayor es garantizar los depósitos de todos los demás bancos (regionales). Es un poco de calma antes de la próxima tormenta", explicó Tony Sycamore, analista de IG Markets en Sidney.
La semana pasada terminó con un destello de indicadores de tensión en los mercados financieros y con el mayor banco alemán, Deutsche Bank, en el punto de mira: sus acciones cayeron un 8,5% el viernes y el coste de asegurar sus bonos contra impagos subió bruscamente.
El Deutsche Bank cayó 15% y arrastró bolsasEl lunes, las acciones de los bancos asiáticos registraban resultados dispares: se mantenían estables en Australia y Tokio, pero caían en Hong Kong, donde las acciones de Standard Chartered caían un 4%. Los futuros del S&P 500 subían un 0,5% y los futuros europeos avanzaban un 1%.
La quiebra de SVB hace poco más de dos semanas ha repercutido en todo el mundo y ha hecho que los depositantes estadounidenses huyan de los bancos más pequeños en busca de entidades mayores, mientras que el revés a la confianza obligó a Credit Suisse a echarse en brazos de su competidor UBS la semana pasada.