En lo que transcurrió de la actual campaña 2022/23 -al igual que sucede en gran parte del territorio argentino-, en Tucumán se registraron temperaturas que superan el umbral de la normalidad, así como también una pronunciada sequía que se extiende desde hace varias campañas.

Estas particulares condiciones térmicas e hídricas dominaron la región y presentaron un escenario desfavorable para el desarrollo de los principales cultivos de la provincia. A raíz de ello, los integrantes de la sección Agrometeorología de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc) -Jorge Forciniti, María Lorena Soulé Gómez, Ángel Martín Leal y José María Medina- realizaron un informe que analiza el comportamiento de las temperaturas, heladas y precipitaciones entre julio del año pasado y febrero del año en curso, en la región del piedemonte y en la llanura tucumanas, lugares donde se desarrollan los principales cultivos de la provincia.

Para el análisis del comportamiento de las principales variables meteorológicas se utilizó como base información de la red pluviométrica que opera la Eeaoc y datos generados por estaciones automáticas telesupervisadas, que generan registros meteorológicos con una periodicidad de 15 minutos. Además, se tomó como referencia el comportamiento de las temperaturas y de las precipitaciones de cuatro localidades; dos ubicadas en el área pedemontana y dos en la llanura. En el piedemonte, con la estación central de la Eeaoc, en El Colmenar (departamento Tafí Viejo), y con la subestación Santa Ana de la Eeaoc, en Santa Ana (Río Chico). En la llanura, con la subestación Monte Redondo de la Eeaoc, en San Agustín (Cruz Alta); y en la localidad de Casas Viejas (La Cocha).

Además, la institución dispone, para la localidad de El Colmenar, de una serie de datos de temperaturas con más de 110 años de registros. De estos, para el análisis, se tomaron como base los últimos 50 años: desde la campaña 1972/73 a la actual campaña 2022/23. En el caso de las precipitaciones, se tomó el mismo período de referencia, pero para las cuatro estaciones referenciadas en el mapa.

Promedio

El informe indica que en el aspecto térmico, el verano 2023 es el más caluroso de los últimos 60 años a nivel país, con una anomalía de +1,7º C, según lo expuesto por el Servicio Meteorológico Nacional. De acuerdo con este ente, en lo que va del año se produjeron ocho olas de calor, cuando lo habitual es que no se produzcan más de cinco. Esto nos indica un mayor número de días con temperaturas máximas por encima de un umbral, calculado a partir de percentiles.

El comportamiento de las temperaturas en nuestra provincia no fue la excepción. Como se puede apreciar en la figura, hay una tendencia creciente de las temperaturas máximas medias calculadas para el período julio-febrero, con la particularidad de que las tres últimas campañas se encuentran dentro de las siete campañas más calientes de los últimos 50 años y que la actual (2022/23) se posiciona como la más caliente de toda la serie con 28,5º C, dejando atrás a la campaña 1988/89 donde se registró un promedio de 28,3º C.

El hecho de que la actual campaña 2022/23 constituya un récord respecto de los últimos 50 años se debe en parte a que las temperaturas máximas medias mensuales fueron extremadamente superiores a lo normal (superiores a tres desvíos estándar) en los meses de noviembre, diciembre, enero y febrero.

Además, el primer mes del año en curso se caracterizó por ser el enero más caliente de este período de referencia: en 25 de los 31 días del mes se superó el promedio de referencia para este período.