Un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que se presentó este jueves, determinó que Rusia cometió crímenes de guerra desde el inicio de la invasión a Ucrania. Se documentó "un amplio abanico" de violaciones a los derechos humanos. "El uso de tortura puede constituir crímenes de lesa humanidad", advirtió la comisión independiente de expertos enviada por la ONU.
Aunque los investigadores no encontraron pruebas de genocidio, sí documentaron posibles crímenes de lesa humanidad por parte del Ejército ruso y "un pequeño número de violaciones" cometidas por las fuerzas ucranianas.
"El conjunto de pruebas recopiladas demuestra que las autoridades rusas cometieron un amplio abanico de violaciones del derecho internacional de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario en muchas regiones de Ucrania. Muchas de ellas equivalen a crímenes de guerra", concluyó el documento.
Las violaciones incluyen "homicidios intencionados, ataques contra civiles, confinamiento ilegal, tortura, violación y traslados y deportaciones forzosos de niños", según pudo establecer la ONU. Erik Mose, uno de los tres comisarios a cargo de la investigación, informó a la prensa que "no constatamos que hubiera un genocidio en Ucrania".
La comisión concluyó "que las fuerzas armadas rusas llevaron ataques con armas explosivas en zonas pobladas con una aparente indiferencia por los daños y el sufrimiento de los civiles". También "documentó ataques indiscriminados y desproporcionados, así como la falta de adopción de precauciones, en violación del derecho internacional humanitario".
Además, constató que la serie de bombardeos que comenzaron en octubre contra las infraestructuras relacionadas con la energía de Ucrania y "el uso de tortura por parte de las autoridades rusas pueden constituir crímenes de lesa humanidad".
Hasta ahora, el grupo interrogó a 348 mujeres y 247 hombres. También visitó 56 localidades donde inspeccionó sitios destruidos y lugares de sepultura y de tortura.
Por otro lado, los investigadores documentaron "un pequeño número de violaciones cometidas por las fuerzas armadas ucranianas, incluidos probables ataques indiscriminados y dos incidentes que pueden considerarse como crímenes de guerra".
El informe recomendó "que se investiguen todas las violaciones y crímenes y que los responsables rindan cuentas, tanto a nivel nacional como internacional". En ese marco, pidió "un enfoque integral de la rendición de cuentas que incluya tanto la responsabilidad penal como el derecho de las víctimas a la verdad, la reparación y la no repetición" de los crímenes.