El deceso de un enfermero del hospital de Monteros y la información de que un anestesista del mismo hospital sigue en grave estado por un cuadro de neumonía bilateral han disparado las alarmas. Mientras los integrantes del Consejo de Enfermería reclaman información y acciones del Gobierno ante lo que, se teme, pueda ser un brote –ya hay cuatro personas fallecidas- el ministro de Salud de la provincia debió salir a dar una conferencia en la que descartó que haya un brote, ya que aseguró que los casos no están relacionados.

La falta de datos certeros sobre los contagios de neumonía bilateral ha ido creciendo desde comienzos de enero, cuando se dio el primer caso y desde entonces han faltado precisiones que permitan a los familiares de las personas afectadas saber concretamente qué ha sucedido. “No hay explicaciones razonables que expliquen qué pasa”, dijo una referente de los enfermeros, que hizo notar que esta situación golpea especialmente a los trabajadores de la salud. “Esta infección seguramente tiene en común el lugar de trabajo, quizás los espacios cerrados como lo son las terapias intensivas. Los comunicados del Ministerio de Salud nos generan sentimientos encontrados ya que no vemos que tomen medidas para solucionar esta cuestión”, se quejó.

Ayer se dio a conocer el caso de una familia cuyos integrantes se contagiaron, aparentemente, en un velorio. Tres personas fallecieron y otras están internadas en grave estado. Los familiares reclamaron que no hubo respuestas acerca de lo que les pasó. Lo mismo contó hace días un periodista, cuyos familiares fallecieron en el lapso de una semana. Se preguntó cuántas personas están contagiadas en la provincia y cuantas murieron. Por todo esto, a través de las redes sociales, grupos de enfermeros están convocando a una marcha para mañana a las 18.30, en la plaza Independencia, a fin de exigir respuestas y pedir seguridad laboral.

El ministro de Salud Pública dijo en la conferencia de prensa de ayer que “en este último tiempo hemos detectado pacientes (contagiados) que trabajan en instituciones privadas y públicas, y también familias en este contexto, y se les realizaron todos los estudios correspondientes”. Aseveró que “no hay ningún germen agresivo que esté comprometiendo la salud de los tucumanos. No hay ninguna bacteria o virus que esté comprometiendo la vida en forma inusual”. Agregó que la cantidad de pacientes con neumonía “no ha excedido el promedio de todos los años”, y que los contagios responden a casos aislados. “No hemos encontrado que haya un germen causal de todos los casos”, concluyó.

No obstante, han pasado dos meses desde que surgió la inquietud de los casos se neumonía bilateral y las respuestas de estudios se hacen esperar, con lo cual se alimentan las dudas y la incertidumbre de los familiares. No ha pasado mucho tiempo desde que se padeció la crisis por los casos de Legionella y la falta de información fue crítica. Los enfermeros insisten en que “se deberían estudiar los contactos, las fuentes, el ambiente, por qué fue este sector y no otro… No se hace nada y la investigación epidemiológica exige eso: une estudio minucioso de los factores de riesgo”, Eso deberían asegurar las autoridades, para despejar la incertidumbre.