En medio de una campaña por erradicar los crímenes y delitos de pandillas que aquejan al país, el gobierno de El Salvador mostró impactantes imágenes de cómo fue el traslado de 2000 pandilleros a una mega cárcel hace poco inaugurada. El nuevo penal es el más gran de América y es caracterizado por su estricta vigilancia, lo que generó enfrentamientos con algunas organizaciones de Derechos Humanos.
Jaldo, sobre la nueva cárcel de Benjamín Paz: "es la obra más importante en infraestructura de Tucumán"“Esta será su nueva casa, donde vivirán por décadas, mezclados, sin poder hacerle más daño a la población” anunció con orgullo Nayib Bukele, presidente de El Salvador, cuando se confirmó que los presos serán trasladados al penal de máxima seguridad.
La construcción del Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), que ha levantado alertas entre múltiples organismos de derechos humanos, constituye el más reciente paso en la lucha contra las pandillas que El Salvador lleva encabezando desde hace meses.
Esta gigantesca prisión está ubicada en las afueras de la ciudad de Tecoluca -a 74 kilómetros al sureste de San Salvador- y destaca por sus rigurosos controles de ingreso y su alta tecnología para la vigilancia.
Cómo fue el traslado de los pandilleros a la nueva cárcel
Pandilleros con el torso desnudo, vistiendo apenas pantalones blancos y sin ningún tipo de calzado, custodiados por policías mientras se alinean en un gran patio de otra de las prisiones en el país, esas fueron las imágenes que más resonancia tuvieron y recorrieron el mundo.
Momentos más tarde, con las manos esposadas en sus espaldas, son subidos a autobuses y trasladados bajo fuertes medidas de seguridad hacia el nuevo centro penitenciario, a donde llegaron cerca del amanecer. Todo el trayecto estuvo custodiado por varios helicópteros militares que sobrevolaron los colectivos y contó con el apoyo de cientos de oficiales de la policía, agentes de seguridad de la Dirección de Centros Penales y hasta de soldados.
“Célula a célula estamos eliminando este cáncer de la sociedad. Sepan que no volverán a salir caminando del CECOT, pagarán por lo que son… cobardes terroristas”, escribió por su parte el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro.
Según cifras oficiales, desde que Bukele dispuso el régimen de excepción y la lucha intensiva contra las pandillas -principalmente la Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18- hace casi un año, el país ha experimentado un considerable descenso en los índices de crímenes y violencia.
En 2022 se habrían reducido en un 57% los homicidios gracias a la detención de unos 64.000 supuestos pandilleros o sujetos posiblemente ligados a ello.