Muchos gremios iniciaron un rumbo de negociación con cláusula de revisión como principal condición. Con un ojo en la inflación, Raquel "Kelly" Olmos encara este proceso con el objetivo de que el poder adquisitivo supere la tasa de aumento de precios.
"La inflación no es descontrolada", definió la ministra de trabajo a Ambito.com y apuntó que dentro de la gestión "estamos trabajando para que la inflación descienda; no podemos hacer en shock porque eso implicaría un golpe en los sectores más desprotegidos. Hay que hacerlo con un gradualismo". Sin embargo, destacó que "hoy tenemos un récord de empleo registrado, histórico: 13 millones de trabajadoras y trabajadores".
La titular de la cartera de Trabajo ratificó que es posible alcanzar "la meta del 60% de inflación anual" y consideró que el aumento de precios del 6% enero del 2023 no tuvo un impacto coyuntural en la economía de los asalariados por los acuerdos paritarios cerrados a fines del 2022, que promediaron un "6,5%". "Esto significa que hubo recomposición y capacidad de adelantarnos al índice inflacionario que se ha dado. Es decir que no hay un retraso", concluyó.
Con respecto a la negociación paritaria, Olmos aseguró que "no tenemos como objetivo que el salario sea el aspecto antiflacionario. Se trabaja con diálogo tripartito y con la construcción de confianza, entendiendo que hay intereses divergentes" y que "se pueden poner revisiones más acotadas en el tiempo, eso no cambia el rumbo".
Finalmente, la ministra sostuvo que "la gran destrucción de la capacidad adquisitiva fue durante los años 2018 y 2019. Durante la gestión del macrismo, en tres de los cuatro años se deterioró la cantidad de empleo y se demolió la capacidad adquisitiva de los salarios". "Como resabio de ese proceso destructivo, tenemos una cantidad de trabajadores informales de los cuales sus ingresos resultan muy insuficientes y el Estado acompaña con la AUH, con la Tarjeta Alimentar e incluso con el programa Potenciar", agregó, entrevistada en CNN Radio.