Un sismo de magnitud 6,3 sacudió el lunes la región fronteriza entre Turquía y Siria, provocando pánico y causando daños en edificios de la ciudad turca de Antioquía, dos semanas después de que el peor seísmo de la historia moderna del país dejó decenas de miles de muertos.
Dos testigos de Reuters reportaron un fuerte seísmo y nuevos daños en edificios del centro de Antioquía, donde estuvo el epicentro. El temblor también se sintió en Egipto y Líbano, según periodistas de Reuters.
El Centro Sismológico Europeo del Mediterráneo (EMSC) indicó que el temblor tuvo una profundidad de dos kilómetros.
Otros testigos dijeron que los equipos de rescate turcos estuvieron recorriendo la zona tras el último seísmo, comprobando que la gente estuviera ilesa.
Muna Al Omar, una residente, dijo que estaba en una tienda de campaña en un parque del centro de Antioquía cuando se produjo el terremoto. "Pensé que la tierra se iba a abrir bajo mis pies", señaló llorando mientras abrazaba a su hijo de siete años. "¿Habrá otra réplica?", preguntó.
Los fuertes terremotos de febrero, que también sacudieron la vecina Siria, dejaron a más de un millón de personas sin hogar y mataron más de las reportadas en el más reciente recuento oficial con 46.000 fallecidos en ambos países.