Sergio Fara, presidente de la Unión Cañeros Independientes de Tucumán (UCIT), y Mario Tizeira, representante de la misma entidad, solicitaron que los bloques legislativos del oficialismo y de la oposición aprueben por unanimidad el decreto de necesidad y urgencia (DNU) firmado por el gobernador, Osvaldo Jaldo, para autorizar las contrataciones directas para la reparación del dique de El Cadillal.
El instrumento será tratado en el recinto de la Legislatura en una sesión especial convocada para el próximo martes por el vicegobernador, Sergio Mansilla.
Ayer, los representantes del sector cañero estuvieron en la Casa de Gobierno junto a Jaldo, y le transmitieron su apoyo.
“Que se trate el DNU para reparar El Cadillal es sumamente importante. Esperamos que los legisladores den un acompañamiento unánime al gobernador en esta gestión porque si no, nos veríamos muy perjudicados en el aspecto productivo y social, por los desastres que podría causar el daño en la presa”, sostuvo Fara.
En esa línea, aseguró que contar con el embalse reparado para la época de zafra “es muy importante, más en momentos de sequía como los que vivimos”. Y expuso que el panorama de Tucumán podría verse afectado de forma similar a lo que se vive en Salta y en Jujuy. “Los productores cañeros de esas provincias están manifestando que posiblemente tengan una pérdida de un 50% respecto a la producción del año pasado. Esto alarmante y no debemos olvidar que el país necesita azúcar para el consumo interno, y necesita producir bioetanol para el movimiento y la mezcla de las naftas”, agregó Fara.
En los próximos días se definirá la empresa adjudicataria de la obra, mediante contratación directa -previo cotejo de precios-. El monto del proyecto ronda los $700 millones, con un plazo de ejecución de unos cinco meses, según estimaciones oficiales.