Golpeada por el brutal asesinato de su enamorado, el cual tuvo que presenciar aquella madrugada del 18 de enero de 2020, Julieta Rossi, novia de Fernando Baéz Sosa, enfrenta la vida aferrandose a una de sus grandes pasiones: el baile. La joven muestra sus vídeos y es furor en la red social TikTok.
La emotiva carta al "cielo" de un padre que perdió a su hijo dirigida a Fernando Báez SosaDurante su noviazgo con Fernando, Julieta ya tomaba clases de tango, pero luego de la muerte de su novio la muchacha afianzó aún más su vocación y pasión por el baile. Bailar se transformó en un importante refugio para la jovencita que siempre supo que en algún momento tendría que revivir aquella fatídica noche de enero cuando comience el juicio.
La chica debía prestar declaraciones el martes pasado, segundo día de audiencias, y si bien todo estaba pautado para que eso ocurriera, desde la defensa de la familia de Báez Sosa señalaron que Julieta no se encontraba en condiciones anímicas de dar testimonio.
Cómo es la novia de Fernando Báez Sosa en las redes
Fuera del proceso judicial del que inevitablemente la joven es parte -al ser testigo del crimen- la chica es furor en las redes sociales, en especial en TikTok, por sus coreografías.
Julieta es especialista en Dance Pole y deleita a sus seguidores con coreografías que lleva a cabo en distintos lugares: en su casa, en un auto o en un estudio de baile. Sus videos tienen cientos de miles de reproducciones y decenas de comentarios. En muchos de los videos se la puede ver haciendo coreos sola o con amigos.
¿Cómo se conocieron Fernando y Julieta?
La historia de amor entre Fernando y Julieta arrancó de manera formal en 2019. Ambos iban al colegio Marianista pero no eran compañeros de curso. Sin embargo, una amiga en común fue quien los presentó en el último año.
El noviazgo entre los jóvenes inició oficialmente en 2019, luego de que Fernando le propusiera formalmente ser novios. Sin embargo, ya se conocían y hablaban desde el año anterior.
Los primeros acercamientos fueron, en febrero de 2018, cuando ambos participaron del Proyecto Servir, en el que a través de la institución donde estudiaban, realizaban trabajos comunitarios en los lugares que lo requerían.
Al principio ambos se habían inclinado y anotado por estudiar la carrera de Derecho. Sin embargo, Julieta optó luego por arquitectura, pero a mitad de ese 2019 se arrepintió y volvió al plan inicial para cursar Derecho junto a Fernando.
10 meses de noviazgo llevaban los jóvenes cuando aquella madrugada de 2020 ocho rugbiers asesinaron en patota a Fernando.