Mariano García me contactó por Instagram y me preguntó si podía hacer un videoclip de una de sus canciones: ‘es una canción sobre Tucumán. Quisiera que hagas lo que se te dé la gana”, me escribió. Me gustó el tema, le propuse que usáramos imágenes del diario ‘El Orden’ y que grabáramos en la biblioteca de la Fundación Miguel Lillo donde están estas publicaciones. Antes de la pandemia, hojeando un ejemplar de 1929 encontré una imagen muy buena del estreno de Metrópolis en los cines de Tucumán que -sospecho- fue el disparador de este videoclip.

Los diarios que usamos para el video son de 1927. Encontramos en sus páginas varias publicidades muy lindas de cigarrillos que ya no se fabrican, una noticia sobre Buster Keaton que atesoramos con la cámara y un dibujo del local Sportman que está en la calle Muñecas, entre otros hallazgos.

"Tucumán” a través de un videoclip

No teníamos un guión así que todo se improvisó sobre la marcha y también durante el proceso de edición. El videoclip es -en parte- un breve registro documental sobre Mariano a la deriva, en diferentes lugares de la provincia, recibiendo indicaciones de la gente. Sólo teníamos algunas locaciones en mente como El Bajo y los jardines del Lillo. Mariano sugirió luego que grabáramos algo en Famaillá y que en algún momento hubiera sandías. Así que viajamos al sur y tuvimos suerte porque la gente del lugar se entusiasmó mucho y quiso aparecer en el videoclip. Por ejemplo, un vecino que tenía un ómnibus se prendió para actuar y manejar. Así se fue armando la historia.

Mauricio Asial fue el director de fotografía; Jerónimo Cipriani hizo tomas con su handycam en El Bajo; Sebastián Suárez realizó la posproducciónn de color. Me parece que Mariano actuó muy bien, sobre todo en la parte en  que canta. Para lograr el efecto de él cantando en cámara lenta, tuve que grabarlo cantando en vivo una versión muy acelerada de la canción, al doble de su velocidad normal. Cantó rapidísimo por las angostas veredas de El Bajo. Fue incómodo para todos, peatones y equipo técnico.

Son interesantes las devoluciones del público. Hay un comentario de un usuario de YouTube que dice que el videoclip es la historia de un hombre agobiado que escapa de la rutina para sentirse libre en el interior de Tucumán.