La pandemia de coronavirus semejó esos golpes que encuentran a la persona mal parada, a punto tal que no puede evitar la caída. En algunos casos, sin embargo, ese desplome apenas dura un instante, porque debido a una buena capacidad de reacción, el caído se incorpora, y rápidamente se asienta del modo en que mejor resistencia opone al embate. Y luego sigue su marcha, sin temor a caer otra vez.

Algo similar ocurrió en la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino (Unsta) cuando la llegada de la covid-19 motivó a que el Gobierno nacional dicte el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) que, entre otros, implicó el cierre de toda institución educativa.

“Antes de la pandemia ya estaba todo bastante digitalizado. La pandemia llegó en el medio de las inscripciones de 2020. La universidad estaba en un proceso de transformación, tanto en lo administrativo como en lo académico, hasta el punto de que muchas de las cátedras usaban aulas virtuales como apoyo a la presencialidad”, contó a LA GACETA el rector de la Unsta, Francisco José López Cruz.

Añadió que a un par de semanas de vigencia del ASPO, la institución ya había abierto 1.000 aulas virtuales. “Se pudieron dictar todos los contenidos de todas las materias, de todos los planes de estudio, de todas las carreras de la Universidad. Y fuimos pioneros en el tema de exámenes; cuando algunas instituciones tomaban como criterio prorrogar clases y exámenes, nosotros nos dimos cuenta que de algún modo había que solucionarle el hoy al estudiante. Y cuando estos se dieron cuenta de que podían cursar, rendir y recibirse fue notable la cantidad de reinscritos; creo que fue récord”, dijo.

López Cruz destacó que actualmente todos los procesos administrativos están digitalizados en la Unsta. Explicó que el interesado puede inscribirse las 24 horas del día, los 365 días del año; en el sitio web se saca turno para, luego, presentar la documentación física. Pero adelantó que van por más.

“Actualmente estamos en un proceso de digitalización de la Universidad en general, para usar la información sobre los datos del estudiante, de su recorrido, de cómo transita su carrera”, contó.

Explicó que toda esa información servirá para ver cómo le va al estudiante en general, a nivel del rendimiento académico; para que, mediante este análisis de datos, se los pueda ayudar en aquellos casos en los cuales se verifique que puede haber algún riesgo académico, o que haya dejado de asistir.

“Por ejemplo, este año establecimos la campaña ‘Volver a estudiar’, para aquellos alumnos que habíamos detectado que por alguna razón habían dejado la carrera; y 300 alumnos volvieron a las aulas”, remarcó.

La planificación estratégica proyectada por las autoridades de la Unsta abarca el próximo quinquenio, y será presentada en marzo del año que viene. “Una de sus bases tiene que ver con la digitalización de la Universidad. Nos interesa este proceso para seguir la ‘huella digital’ del alumno. Esto tiene que ver con el data mining (N. de la R.: proceso que analiza gran cantidad de información y la convierte en conocimiento) sobre datos concretos del alumno: su rendimiento académico, las materias que más le interesan, y en las que más participa, entre otros. Nuestro objetivo es seguirlo, verificar su recorrido estudiantil para ver cómo uno le puede ir proporcionando cosas que le sirvan”, puntualizó.

Subrayó que este proceso no abarcará solo al alumno, sino también a los docentes de la Unsta y, sobre todo, a los graduados: “se trata de la Universidad del futuro”.

Secundario

En paralelo, López Cruz agregó que también contemplan la posibilidad de dar una mano en lo que respecta a la crisis de los últimos años del secundario, según dan cuenta algunos indicadores. “La universidad debe arrancar antes. Para el ciclo lectivo 2024 tenemos previsto un programa optativo, para que el alumno del último año del secundario vaya cursando alguna materia de la universidad, en la cual haya un fuerte componente de comprensión de textos. Algunos alumnos no entienden las consignas, no entienden lo que se les pide. Estamos preocupados por acercarnos al secundario; la Universidad se debe hacer cargo. Nos interesa el desarrollo de la región, y este pasa por la educación”, concluyó el rector de la Unsta.