El año parece cerrar con una nueva señal de alerta para la salud. En las dos últimas semanas se registró una abrupta suba de casos de covid-19. Los índices de contagios llamaron la atención de los especialistas y, casi de inmediato, se preguntaron si es que empezó una nueva ola de contagios en Argentina.

Es un interrogante que tiene sus fundamentos, porque el número de casos desde el inicio de los síntomas creció un 369% a nivel nacional durante estas dos últimas semanas, en comparación con la quincena anterior. Ante esta situación aparecieron otras preguntas: ¿qué escenarios vislumbran los expertos en infectología y medicina respiratoria?, ¿qué comportamientos debe tener la ciudadanía frente a estas cifras?, ¿es necesario aplicarse los refuerzos de vacunación contra el coronavirus?, entre otros interrogantes.

Tucumán no escapa a este llamado de atención. En nuestra provincia, los casos de covid-19 aumentaron un 50% en la última semana, según lo anunció el ministro de Salud, Luis Medina Ruiz. Además, el funcionario recomendó colocarse la vacuna de refuerzo y usar barbijos en lugares cerrados o de mucha concurrencia. Para muchos ciudadanos volver a hablar de coronavirus es como un dolor de cabeza. De inmediato, el pensamiento retrotrae a los meses de la pandemia en 2020. Sin embargo, la realidad vuelve a marcar un escenario complejo. Las cifras de contagio así lo demuestran en todo el mundo. En lo que respecta a Argentina se duplicó la cantidad de casos por semana. Entre las 24 jurisdicciones del país, 22 han registrado un crecimiento de contagios. En algunas jurisdicciones el aumento ha sido más pronunciado, como por ejemplo en la Ciudad de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires y Tierra del Fuego.

Esta ola de nuevos contagios también se produce en otros países de la región, como Brasil y Chile junto con más casos de gripe y bronquiolitis. La escalada que se registró desde noviembre en la Argentina es tan rápida como la que ocurrió en diciembre del año pasado. En aquel momento, la población argentina debía ir a hacerse la prueba para confirmar o descartar covid-19. En cambio, desde abril de este año, solo los grupos priorizados, como las personas mayores y las personas con factores de riesgo, deben ir a hacerse el hisopado. Si bien crecieron los casos de covid-19 en 22 de las 24 jurisdicciones del país, la situación aún no se ha trasladado al aumento de internaciones y fallecimientos. Por eso es importante que las personas vayan a recibir el segundo o el tercer refuerzo para prevenir cuadros graves. En especial, los mayores de 50 años deben aplicarse las dosis de refuerzo.

Según el último boletín epidemiológico del Ministerio de Salud solo el 47,4% de la población fue a aplicarse el primer refuerzo. Los que más se lo aplicaron son las personas mayores de 50 años. Con respecto a los niños, niñas y adolescentes, en el grupo entre 12 y 17 años la cobertura con el primer refuerzo solo alcanzó el 37,2%. Actuar con responsabilidad es la clave para evitar males mayores.