Una y otra vez le preguntaron a Lionel Scaloni sobre la condición de candidatos y sobre alguna pretendida inferioridad de Australia. Una y otra vez el técnico de la Selección negó esa posibilidad, hasta que sentenció: “acá no hay que confiarse de nadie”. Ese es el espíritu con el que Argentina aguarda el partido de octavos de final. “Hay que dejar de lado el teórico favoritismo -subrayó-. Si el rival es inferior eso hay que verlo; la única realidad es que somos 11 contra 11. Lo que debemos hacer es jugar los partidos y sostener nuestra idea”.
Scaloni habló de Australia como de un buen equipo, rápido, ordenado, que hizo una buena eliminatoria y cuenta con jugadores experimentados en la media cancha. “A mí no me sorprendió que se hayan clasificado eliminando a Dinamarca. Saben lo que quieren y tienen su nivel de dificultad. Es un partido complicado, de Mundial. Para nosotros lo importante es la recuperación y ver cómo responden los jugadores -sostuvo-. Entonces decidiremos el equipo”.
Esto corrobora lo que se suponía respecto de la titularidad de Ángel Di María, ya que el cuerpo técnico está dispuesto a esperarlo hasta horas antes de salir a la cancha. Scaloni no dio precisiones acerca de la molestia física que padece Di María (se negó a hablar de contractura), aunque se sabe que se trata de una sobrecarga en el cuádriceps que lo obligó a salir el miércoles pasado, cuando estaba jugando muy bien contra los polacos. “Esperemos que Ángel está bien, y si está disponible jugará”, indicó.
¿La formación será la misma del miércoles? “Los que me conocen saben que no soy de seguir siempre con los mismos, soy más de sensaciones y de elegir en función de lo que se pretende para cada partido -apuntó el DT-. Pero es cierto que contra Polonia la sensación fue muy buena. Lo fundamental es que cada uno sepa lo que tiene que hacer. Nosotros pensamos partido a partido, sabemos que no es necesario jugar siempre con el mismo equipo”. De esta fundamentación se desprende lo de “la sensación fue muy buena”. En resumen, salvo el tema de Di María, es muy difícil que haya cambios.
En un veloz pantallazo sobre lo que va jugándose del Mundial, Scaloni tocó dos temas. Dijo que no lo sorprendió la eliminación de selecciones grandes (“hay otros equipos que están muy bien preparados”) y fue más bien irónico respecto de la actuación del VAR. “Nosotros lo sufrimos, es difícil de digerir -sostuvo-. Es algo nuevo y se presenta en un Mundial, eso choca más. Pienso lo mismo que dijeron Luis Enrique y los demás. Si bien esto fue repentino, las reglas son parejas para todos. Es lo que hay. Eso sí: que a las líneas del off-side las midan con reglas, con escuadras, para que no se tuerzan”.
La ilusión de la gente es uno de los motores que impulsa al equipo. Según Scaloni, el miércoles fue como haber jugado en Argentina. “El apoyo siempre ha estado -consideró-. El público se hace notar. Es lo que transmite la camiseta de la Selección, con Diego y con Leo. Nos llena de orgullo”. Y como es un fenómeno que se multiplica por el mundo, Scaloni hasta agradeció lo que sucede en países como Bangladesh. Hasta allí está llegando la locura por la Scaloneta.