El árbitro Szymon Marciniak fue designado para controlar el partido de este sábado entre la Selección argentina y Australia, por los octavos de final del Mundial de Qatar 2022. No es la primera vez que el polaco dirige a la Selección en un mundial, ni tampoco a Lionel Messi, que no pudo ganar ninguno de esos partidos.
Nacido el 7 de enero de 1981 en Plok, Marciniak es conocido principalmente por su carrera arbitral, pero esconde detrás una etapa como futbolista semiamateur. Su final anticipado llegó durante un encuentro en el que fue expulsado y descargó su furia contra el juez de ese partido.
Luego de que un árbitro lo desafiara a hacer su labor, Marciniak decidió prepararse para ejercer la labor de colegiado. En 2002, comenzó su carrera y casi una década después fue seleccionado por el Centro de la UEFA para la Excelencia del Arbitraje (CORE) para perfeccionarse en su labor. Estuvo bajo las órdenes del ex árbitro británico David Elleray.
Su debut como árbitro internacional llegó el 16 de septiembre de 2014, nada más y nada menos que en un partido de Champions League: fue victoria de la Juventus ante Malmö por 2-0, en la primera fecha de la fase de grupos.
Desde entonces, su carrera solo fue en ascenso: dirigió partidos en la Eurocopa, en la Europa League, en la UEFA Conference League, en la Copa Mundial Sub-20 de 2017 y en el Mundial de Rusia 2018.
Hasta el momento, tiene 549 partidos en su historial. En ellos mostró 2210 tarjetas amarillas y 67 rojas. Además, tiene un muy alto promedio de penales cobrados, con un total de 244. Es decir uno cada 2,25 partidos.
El récord negativo de Lionel Messi con el árbitro de Argentina-Australia
Lionel Messi tiene la gran mayoría de estadísticas a su favor. Sin embargo, tiene un récord negativo con Szymon Marciniak . Las primeras dos veces que el árbitro polaco dirigió a la Pulga fue durante su estadía en Barcelona.
Ambos partidos no solo terminaron en derrota, sino en goleada. El primero de ellos fue en la ida de los octavos de final de la Champions League 2017, en la histórica derrota 4-0 frente al PSG en el Parque de los Príncipes (en Cataluña, con otro árbitro, iba a llegar la hazaña del Barça con el 6-1 para pasar de ronda).
La segunda fue en la siguiente instancia de esa misma edición. En el primer partido de cuartos de final ante la Juventus, Barcelona sufrió otra caída muy dura: 3-0 en Turín. En la revancha, el marcador terminó igualado sin goles y el conjunto azulgrana se despidió del certamen internacional.
Marciniak volvió a dirigir a Leo por tercera vez, pero esta vez con la camiseta de la Selección argentina. Fue nada más y nada menos que en el debut de Argentina en el Mundial de Rusia 2018, frente a Islandia en el Estadio Spartak. La historia es conocida: Sergio Agüero abrió el marcador y Alfred Finnbogason estableció el 1-1 definitivo.