El astro del fútbol, Lionel Messi, dijo que el sábado arrancó otro Mundial para Argentina porque el equipo volvió a la buena senda tras vencer 2-0 a México en su segundo partido del Grupo C del torneo.
Las declaraciones de “Leo” sonaron a un sentido deseo, pero están fundamentadas sobre todo por lo que mostró el equipo de Lionel Scaloni en los últimos años.
El recuerdo de Rusia 2018 todavía está presente en los pensamientos de muchos argentinos, pero hay varios factores que ayudan a pensar que la historia esta vez puede ser diferente.
A decir verdad, quizás lo único que remite a la pesadilla rusa son los resultados. Argentina no le ganó al más débil del grupo (ahora fue Arabia Saudita, aquella vez Islandia) y llegó a la última fecha contra las cuerdas, clasificando en el segundo puesto, lo que le costó enfrentar a una potencia en octavos (aquella vez fue Francia, esta vez el equipo de Kilyan Mbappe también asoma como posible rival).
“Sabíamos que hoy había que ganar, que hoy arrancaba otro Mundial para nosotros (...) volvimos a ser lo que somos”, dijo Messi tras el triunfo ante México disputado en el estadio de Lusail ante más de 80.000 aficionados.
“No podemos bajar los brazos ahora (...) tenemos todas finales, no podíamos errar”, agregó el “10”, que en el partido con México igualó el récord de Diego Maradona de 21 partidos en Mundiales con Argentina.
Como aquella tarde rusa ante Nigeria, el miércoles Argentina deberá derrotar a Polonia en la última fecha de la fase de grupo para meterse entre los 16 mejores del torneo. En caso de no sumar de a tres puntos dependerá del resultado entre México y Arabia Saudita.
Messi dijo que en el primer partido el equipo su selección cayó por una serie de condicionantes que incluyeron a muchos compañeros que debutaban en un campeonato mundial, aunque aclaró que ahora, ya no había más excusas.
“No podemos bajar los brazos ahora”, repitió el capitán argentino.
En la vereda del frente aparece Polonia, que más allá del triunfo ante Arabia Saudita, no convenció demasiado en las primeras dos fechas, pero tiene nombres propios importantes, como no lo tienen los árabes ni los mexicanos. En ese sentido se destacan tres nombres importantes: Robert Lewandowski, Piotr Zielinski y Wojciech Szczesny.
Las lágrimas de Lewandowski tras marcar el gol que selló la victoria de Polonia sobre Arabia Saudita el sábado mostraron el inmenso peso que tenía sobre sus hombros por no haber anotado nunca en un Mundial, una racha que finalmente rompió antes del vital choque con Argentina en el cierre del Grupo C.
Después de robarle el balón a Abdulelah Al-Malki y de marcar el 2-0 a ocho minutos del final, el máximo goleador de Polonia se tiró al suelo y sus compañeros se le echaron encima para celebrar que Lewandowski rompiera por fin su sequía mundialista.
La presión crecía para el delantero del Barcelona después de no haber marcado en los tres partidos de Polonia en el Mundial 2018 y el empate inicial del martes contra México, en el que además erró un penal.
A sus 34 años, Qatar podría haber sido su última oportunidad. Además, el gol llegó en un partido de gran importancia.
Polonia necesitaba al menos un empate para tener alguna posibilidad real de llegar a los octavos de final por primera vez desde 1986. Ahora Polonia lidera la zona con cuatro puntos y el miércoles enfrentará a una Argentina que llega ilusionada.
El seleccionador polaco, Czeslaw Michniewicz, cambió de táctica con respecto al partido de México, en el que Lewandowski fue el único delantero. El sábado se asoció con Arkadiusz Milik y se movió por todo el frente de ataque, actuando como centrodelantero, como pivote y también como un exquisito habilitador.
“Creo que cuanto más viejo me pongo, más me emociono, y soy consciente de puede que este sea mi último Mundial”, dijo Lewandowski tras marcar su gol número 77 como internacional.
“El resultado del equipo era lo más importante (...) Tenemos un nuevo día por delante y tenemos que prepararnos para el próximo partido porque no sabemos lo que va a pasar después. Tenemos que hacer todo lo posible”.
El que le empezó a poner picante a la previa del partido del miércoles fue Szczesny, que advirtió a Messi. “Con Claudio Filippi (entrenador de arqueros de Juventus) encontramos el método para analizar los lanzadores de penales. Messi, ahora te estoy estudiando y no veo la hora de enfrentar a Argentina”, deslizó el arquero que fue la figura de su equipo en los primeros dos partidos.
Mientras tanto, ayer el seleccionado volvió a los entrenamientos, pero recién en la sesión de hoy Scaloni empezará a probar un posible equipo para enfrentar a los polacos. Se presume que no repetiría el 11 que inició ante México.
Enzo Fernández y Nahuel Molina son dos jugadores que podrían ingresar en el equipo titular, en lugar de Alexis MacAllister y Gonzalo Montiel, de todas maneras, fiel a su costumbre, Scaloni recién definirá el equipo horas antes del duelo. Mañana, desde las 10.45, Scaloni brindará la conferencia de prensa habitual ante de los partidos y probablemente deje algunos títulos.