La espera se hace larga. Al tiempo que se confirmó el pronto inicio de la obra de construcción de un pozo, los vecinos de barrios del noroeste de Concepción continúan padeciendo una angustiante escasez de agua potable. Las lluvias que arreciaron en las últimas horas no trajeron mucho alivio para los damnificados que, según denunciaron, “hasta se agotó el líquido de los tanques cisternas enviados por la municipalidad”. La gente sin agua suma más de 5.000 y son de los barrios Zavalía, El Jardín, San Nicolás y Clínica. También hay zonas del microcentro que acusan el mismo drama, pero en menor medida. “Lo que se sufre es indignante. Solo muy avanzada la noche sale un hilo de agua que no nos alcanza para llenar un recipiente de 20 litros. Y la situación empeora. Y lo digo porque días antes podíamos almacenar mucha más cantidad”, contó Silvia Albarracín, del Zavalía. “El agua que nos hace llegar el municipio apenas sirve para la limpieza porque sale medio oscura. No es potable. Por eso cada tanto tenemos que comprar líquido potable que se venden en recipientes de cuatro litros. Hay que tener efectivo día por medio para adquirirlos. De lo contrario tienes que hacerlo hervir el que nos llega en los tanques del municipio”, añadió la mujer. “Ahora hay sectores en el que no hay agua ni para los baños. Es el caso de este barrio en el que permanecemos a la espera de que la municipalidad vuelva a reabastecer las cisternas que se quedaron sin nada”, apuntó Luis Coronel del Zavalía.
“El problema es complicado en las casas en las que hay ancianos y niños. Las lluvias nos trajeron un poco de respiro a la escasez, pero ahora retornan los calores y la situación vuelve a complicarse”, apuntó el hombre. “Lo que exigimos es la urgente perforación del pozo que anunciaron las autoridades del municipio. Es la única solución al drama que padecemos”, reclamó .
Solución
Mientras adquieren efervescencia los reclamos, el intendente, Alejandro Molinuevo, confirmó que a más tardar la próxima semana se iniciarían los trabajos de instalación de un pozo de agua en el sector noroeste de la ciudad. Según dijo, el municipio inicio el proceso de selección mediante concurso de la empresa que se hará cargo de la obra. Esa modalidad de concesión fue autorizada por el Concejo Deliberante en razón de la necesidad de dinamizar el inicio de los trabajos ante la urgencia de habilitar con premura el servicio. El pozo, según precisó, será excavado en la intersección de las calles Catamarca y Costanera. Según un estudio hecho por técnicos de la SAT es el sector más adecuado para extraer agua. En estos momentos esos complejos habitacionales acusan una seria escasez de agua potable. La intendencia recibió $ 30 millones para la obra a través del Ministerio del Interior de la provincia. “Estimamos que la obra puede estar concluida a fin de diciembre o en los primeros días de enero del año entrante. Es lo que esperamos ante la situación afligente que padece la gente. Mientras tanto gestionamos recursos para construir otros dos pozos más”, sostuvo el jefe comunal
Entregaron tanques en Huaico
Los vecinos de Huaico finalmente recibieron de manos de la municipalidad de Graneros tanques para almacenar el agua para consumo. Las 24 familias que habitan el lugar, ubicado al este de La Invernada, acumulaban el líquido en recipientes que habían sido usados con agrotóxicos. Lo recibían directamente del pozo de agua corriente que se inauguró ahí hace unos 10 años durante la gestión del desaparecido ex intendente Roque Graneros. La provisión es directa hacia los grifos de las casas y por esa razón, y ante los frecuentes cortes del servicio, comenzaron a almacenar agua en los envases no reutilizables y que habían contenido productos fitosanitarios. Ante los riesgos que representa para la salud de la gente, el caso fue hecho público por estudiantes de la Escuela de Comercio República de Panamá de Concepción. Estos realizaron en el lugar un estudio de campo correspondiente a la cátedra de Derechos Humanos.
La denuncia fue acompañada por representantes de la Fundación Ambientalista Ave Fénix. Luego Inspectores de Sanidad Vegetal de la Secretaría de Desarrollo Productivo de la provincia realizaron un procedimiento de “gestión ambiental” con el fin de advertir a productores y otros lugareños que deben evitar la utilización de envases vacíos de fitosanitarios para el almacenamiento de agua para consumo.
“Hoy gente de la municipalidad de Graneros comenzó a entregar a las familias de nuestra comunidad tanques para conservar el agua que llega a nuestros hogares. Es un logro que no alcanza a disimular la situación de abandono en que nos encontramos desde hace años”, dijo Johana Graneros, vecina del lugar.