Una fiesta de casamiento genera un gran movimiento de personas, consumo de energía, combustible, agua y otros insumos, lo que genera emisiones de gases de efecto invernadero, que se acumulan en la atmósfera y son responsables del cambio climático. Fue por esto que Martina Costa Paz y Jaime del Sel decidieron mitigar el impacto ambiental de su boda, haciendo que su fiesta fuera carbono neutral. “Somos parte de este mundo y recibimos todo de él. En nuestro día a día somos muy conscientes de esto, intentamos reducir nuestros consumos, separamos los residuos, compostamos y priorizamos comprar a empresas de triple impacto. Incluso elegimos que nuestro camino profesional estuviera alineado con esto”, dijo Jaime, que se dedica a la comunicación y trabaja para empresas de triple impacto. Martina, desde su arte (@amarillomar) busca transmitir un mensaje de conciencia ambiental.

El casamiento de Martina y Jaime tuvo lugar en un espacio de Ingeniero Maschwitz (Buenos Aires) en octubre. Con la ayuda de The Carbon Sink, tienda regional para medir y compensar dióxido de carbono, decidieron cuantificar la huella de carbono, midiendo las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) generadas por el evento. Se contemplaron los viajes de los invitados, de los proveedores, el consumo de la energía, el tratamiento de los residuos, el hospedaje y los servicios tercerizados, entre otros. Los invitados recibieron junto a la invitación un formulario que debieron completar para poder cuantificar las emisiones generadas por su traslado. El casamiento generó 6 toneladas de CO2, lo que equivale a 4,3 algarrobos cortados por año, 46.735 km recorridos en un auto mediano o 10,8 viajes ida y vuelta en avión de Buenos Aires a San Pablo. “Una vez que calculamos la cantidad de dióxido de carbono que generararía el evento, le presentamos a la pareja una serie de opciones de proyectos de captura de carbono certificados que tenemos para poder compensar y neutralizar dichas emisiones”, dijo Federico Falcón, director de The Carbon Sink. La pareja decidió compensar con bonos certificados de “Corredor de los Cedros”, un proyecto de conservación y manejo forestal de bosques nativos en Jujuy. La zona sufre una gran presión por el alto nivel de deforestación y el avance de la frontera agrícola. Este proyecto está evitando la destrucción de miles de km2 de bosque nativo, y con ello, la pérdida de especies como el tapir y el oso hormiguero. “Recomendamos 100% hacer cualquier fiesta carbono neutral, porque la situación climática está llegando a un punto de no retorno”, agregaron los recién casados. (Informe de thecarbonsink.com)