"En este juicio lo que se está buscando es Justicia. Probablemente sea lo único que puedan tener las víctimas ya que muy difícil que pueda recuperar algo de todo lo que dieron'. El fiscal Carlos Saltor culminó de esta manera un alegato de casi 100 minutos durante el cual solicitó nueve años de prisión de cumplimiento efectivo contra el arquitecto Otto Fernando Barenbreuker, quien está siendo juzgado por defraudaciones en fideicomisos por montón millonarios.

Una testigo denunció amenazas de Barenbreuker

Saltor desmenuzó cada uno de los casos que fueron investigados y afirmó que el acusado no sólo sabía lo que hacía sino que además quería hacerlo.  "Barenbreuker acordaba la venta por plazo y les hacía firmar la adhesión a un fideicomiso sin explicar lo que era esto, pero además no cumplía con sus obligaciones como fiduciario", agregó el representante del Ministerio Público. "Muchos firmaban sin saber qué firmaban.  Todas las víctimas fueron perjudicadas. Hubo un abuso de confianza. Incluso hoy, por lo que vimos, hay víctimas que sufren una especie de síndrome de Estocolmo ya que siguen creyendo en él", resaltó Saltor. "Aquí hay un daño patrimonial y en la salud de las víctimas.  La angustia y la injusticia también mata. En todo esto Barenbreuker no se llevó dos caramelos. Se llevó mucha plata", agregó. Saltor también aseguró que el imputado sabiendo que los departamentos no se iban a construir, "los siguió vendiendo". "Barenbreuker nunca se hizo cargo de nada. Para él la culpa de lo que pasaba siempre fue de otro. Hoy las víctimas en vez de tener sus propiedades tiene un cubo de aire", aseveró el fiscal.  Y habló además de las amenazas que dijo haber sufrido una de las denunciantes, Nelida del Valle Mazza.

Al cierre del alegato, Saltor destacó haciendo referencia a los fideicomisos  que "fides en latin significa lealtad y en este caso esa lealtad no existió". Tras esto pidió los nueve años de prisión efectiva para Barenbreuker,  la inhabilitación para ejercer el comercio por el mismo tiempo y que además se dicte prisión preventiva contra el acusado ya que, aseguró, había peligro de fuga.

El debate es llevado adelante por las juezas Stella Maris Arce (presidenta del Tribunal), Wendy Kassar y María Fernanda Bahler, quienes luego del mediodía seguían escuchando el resto de loa alegatos.

A su turno las querellas, representadas por Luis Maria Rizzo, José Paz y Rosa Nosseti, decidieron elevar el pedido. Durante sus alegatos solicitaron que Barenbreuker fuera condenado a 12 años de prisión y reiteraron el pedido que de si se llegara a una condena, se dicte inmediatamente la prisión preventiva para evitar una fuga.

Rizzo, que representa a 12 denunciantes. aseguró que el imputado abusó de la confianza de los fiduciantes. "No fue un buen hombre de negocios. Se aprovechó de ellos", remarcó.  "Debemos apostar a que las conductas delictivas tengan consecuencias. El imputado actuó con avaricia y codicia", remarcó.

Paz, por su parte aseguró que Barenbreuker era "un malabarista de la ley". "Era juez y parte.  Se controlaba a sí mismo.  Y nunca creyó que iba a estar sentado en este juicio. Esto no es un delito que se juzga todos los días", agregó. Nosseti, en tanto, habló en representación de Nelida del Valle Mazza, quien aseguró que el imputado la amenazó dentro de un ascensor,  diciéndole que la sacaría del departamento en el que vivía. "Los que participaron en los fideicomisos eran gente vulnerable. Gente que entregó el resultado de muchos años de trabajo. Y a lo largo de todo este juicio el acusado jamás mostró empatía con ellos. Pero cuatro mujeres fueron valientes en pelear durante 10 años para traer a juicio a este señor", refirió.

Resta el alegato la defensa y luego que las jueces anuncien cuándo se conocerá el fallo.