En el marco del ciclo de capacitaciones que viene dictando desde hace ya mucho tiempo la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc), personal del subprograma de Agronomía de la Caña de Azúcar realizaron dos ediciones de una jornada referida al manejo de la fertilización en este cultivo. El objetivo principal es llegar a todos los productores cañeros de Tucumán en forma más directa; y para ello se desarrollan en dos lugares y días diferentes.

La primera edición se concretó el viernes 28 del mes pasado en la localidad de Esquina (Leales). En tanto, el jueves 10 de noviembre las charlas tendrán lugar en la subestación de Santa Ana de la Eeaoc, a partir de las 9.

Las temáticas abordadas se refieren al aporte de otros macronutrientes a la nutrición de la caña de azúcar, a cargo de Juan Ignacio Romero, de la sección Suelo y Nutrición Vegetal.

Luis Alonso, Pablo Fernández González y Fernanda Leggio, de la sección Agronomía de la Caña de Azúcar, brindaron recomendaciones en lo referente a la fertilización nitrogenada, al uso de biofertilizantes y de bioestimulantes. En tanto, Virginia Paredes, de la sección Economía y Estadísticas, realizó un análisis económico sobre la fertilización de caña soca.

En un año marcado por los problemas económicos, por la falta de insumos claves y por precios elevados en los fertilizantes, muchos cañaverales ya se encuentran en condiciones de iniciar las tareas de fertilización nitrogenada. Esta práctica cultural de máxima importancia exige, a raíz de su elevado costo, una ejecución oportuna y efectiva, a fin de asegurar su máximo aprovechamiento. El momento oportuno para esta labor se encuentra relacionado con el ritmo de absorción del nutriente que tiene el cultivo, siendo máximo en los primeros meses desde la brotación (pleno macollaje).

En ese momento la planta de caña de azúcar absorbe más nutriente del que utiliza, pero tiene la capacidad de almacenarlo para reutilizarlo junto al N aportado por el suelo, durante el período de gran crecimiento (diciembre-marzo).

Los resultados de las investigaciones realizadas por la Eeaoc a lo largo de los años, indican que la fertilización nitrogenada de las cañas socas en secano registra la mayor efectividad cuando se realiza desde octubre y hasta mediados de noviembre, pudiéndose adelantar a mediados de septiembre si se dispone de riego.

Por el contrario, para caña planta lo conveniente es hacerla a fines de noviembre, ya que en esa época el sistema radicular está en condiciones de absorber y de aprovechar mejor el fertilizante. Por lo tanto, la época de fertilización -aun cuando el suelo esté seco- es uno de los principales factores que modifican su beneficio, ya que el gasto es el mismo para diferentes fechas de aplicación, pero no resulta similar el retorno de la inversión, expresado en la mayor producción de caña y de azúcar. Además, en Tucumán está comprobado que retrasar la fertilización con N (diciembre) no sólo generará menores beneficios en la producción de caña, sino que afectará la calidad de la materia prima al provocar una demora en la maduración.