Europa es el continente donde el calentamiento avanza más rápidamente, con temperaturas que subieron más del doble de la media mundial en los últimos 30 años, advirtió la Organización Meteorológica Mundial (OMM), el organismo de Naciones Unidas que estudia el clima, en un informe conjunto que elaboró con el servicio europeo sobre el cambio climático Copernicus.

El informe sale a la luz días antes de la COP27, la conferencia sobre el clima que se celebrará del 6 al 18 de este mes, en Egipto.

Las temperaturas en el Viejo Continente experimentaron un aumento considerable en el período 1991-2021, con un aumento de alrededor 0,5 °C por década.

“Se trata del calentamiento más rápido entre las seis regiones definidas por la OMM”, dijo el secretario general de este organismo, el finlandés Petteri Taalas, en el prólogo del informe sobre el clima en Europa.

El Ártico, que en su conjunto se está calentando más rápido que Europa, no es considerado por la organización como una región, explicó la portavoz Clare Nullis.

Como consecuencia del rápido calentamiento de Europa, los glaciares de los Alpes perdieron 30 metros de espesor entre 1997 y 2021. Asimismo, la capa de hielo de Groenlandia se está derritiendo, lo que contribuye a acelerar el aumento del nivel del mar.

En el verano de 2021, Groenlandia registró por primera vez lluvias en su punto más alto, la estación Summit. Europa “es la imagen viviente de un planeta que se calienta y nos recuerda que incluso las sociedades bien preparadas no están a salvo de las consecuencias de los fenómenos meteorológicos extremos”, señaló Taalas.

“En 2021 se produjeron fenómenos meteorológicos y climáticos extremos en varias partes de Europa”, recordó. “Las inundaciones excepcionalmente graves que causaron un número sin precedentes de muertes y daños en partes de Europa occidental y central en julio, y los incendios que devastaron el sureste de Europa este verano, permanecerán en la memoria de las naciones afectadas y en el registro climático internacional”, afirmó.

Estos fenómenos meteorológicos y climáticos dejaron cientos de muertos en el continente, afectaron a más de medio millón de personas y causaron daños económicos de cerca de 50.000 millones de dólares, dijo la OMM. En alrededor del 84% de los casos se trató de inundaciones o tormentas.

El Acuerdo de París, de 2015, fija el objetivo de contener el aumento de la temperatura media del planeta por debajo de 2°C -y si fuera posible, debajo de 1,5°C- en relación a la era preindustrial. Sin embargo, el planeta se dirige a un calentamiento de 2,6°C para finales de siglo, advirtió la ONU en octubre.

Sea cual sea el ritmo del calentamiento global, en todas las zonas de Europa las temperaturas aumentarán más que la media mundial, como se ha observado hasta ahora, lo que podría provocar olas de calor, incendios forestales e inundaciones. (AFP)