La resolución que obliga al troceo de la media res en piezas que no superen los 32 kilogramos no fue bien recibida por Hugo Benejam, directivo del frigorífico Fidensa. “Hoy en día se despachan alrededor de 200 medias reses por frigorífico. Para hacer el cuarteo que marca la resolución se tardarían cinco minutos por media res, lo que implica que llevaría más de 16 horas despachar las 200”, señaló.

Pero no es la única ecuación negativa que observó. “Un camión mediano transporta alrededor de 60 medias reses por viaje. Al ser cuarteadas, su capacidad de transporte se reduce a solo 15 medias reses. Esto implica, necesariamente, un importante encarecimiento del flete y, obviamente, un entorpecimiento de la logística”, criticó.

En general, consideró que la medida conlleva un fuerte incremento en la mano de obra del frigorífico. “Y eso además de las cuantiosas inversiones en infraestructuras de frío y de zonas de cuarteo que hay que hacer. El Gobierno dijo que entregaría dinero para esas inversiones; pero eso solo quedó en anuncios”, indicó el directivo de Fidensa. Opinó que si se quería cuidar la salud del trabajador que carga la carne se podría haber implementado otro sistema: “Ya se usan medios mecánicos para el traslado de la media res a las carnicerías; carros, camillas, guinches, etcétera”.