“El mejor martes de mi vida”. En un muy buen castellano, aunque haya pedido disculpas por la pronunciación, Chris Martin fue el vocero de Coldplay (lo acompañan con talento y precisión Jonny Buckland, Guy Berryman y Will Champion) en la noche del debut en el primero de los 10 shows que dará ante un estadio repleto de River Plate. Los fans, entregados a su música y a su simpatía, respondieron cada intervención con una salva de aplausos, ovaciones y gritos, para que la simbiosis entre artistas y público fuese absoluta. Y fue sólo el inicio de un romance que concluirá el 8 de noviembre.
Deslumbrante y emocionante pueden ser las dos palabras que mejor sinteticen el espectáculo. Lo primero por la calidad del show en todo sentido (despliegue técnico, luces, sonido y demás) y lo otro, por el homenaje que los británicos le brndaron a Soda Stéreo al interpretar “De música ligera”, tal como ocurrió en la anterior visita, en 2017. Incluso no se descarta que, en alguna de las funciones, algún Soda esté en el escenario para compartir ese momento.“Tienen las mejores voces del mundo aquí en la Argentina. Amo cantar para ustedes, pero más amo que ustedes canten para nosotros. Así que ahora van a cantar para nosotros”, invitó para compartir esa canción.
Martin insistió en el vínculo con la Argentina (incluso enarboló una bandera nacional casi todo el tiempo) cuando dijo: “Buenos Aires es increíble, es la casa de mi corazón, la casa de mi alma”. Para que nadie tenga dudas, dejó sentada su posición política en apoyo a Ucrania ante la invasión rusa cuando cantó “In my place” y redondeó al agradecer al público “por estar aquí pese a todos los problemas en el mundo, ahora: los problemas económicos, el narcotráfico, el covid, las guerras...”.
Entre esos inconvenientes, no se refería sólo a los enunciados. Los miembros del Coldplay militan en contra de la contaminación y por el ambiente; por ello, el vocalista los instó a que salten sobre un piso cinético y pedaleen en bicicletas fijas para generar energía, con la cual alimentar algunos de sus equipos. Hubo más instrucciones, como cuando en “Adventure of a lifetime” marcó los tiempos para saltar todos al unísono; en “Yellow”, que se vincule el público de la popular con el de las preferenciales; que apaguen los celulares en “A sky full of stars” para poder sentir “la energía que hay alrededor, una canción solo con nuestras almas, cuerpos y voces”, sin aparatos que la interfieran y para pedir los coros de temas como en “Paradise”. En su recorrido no faltó ningún clásico, aunque el recital haya tenido como eje su nuevo material, “Music of the Spheres” (el logo de difusión es la imagen redonda de esta nota): entre otros sonaron “Viva la vida” (uno de los más coreados), “The Scientist”, “Nobody said it was easy” y “Sparks”, junto a los nuevos ”Infinity Sign”, “Humankind” o “My Universe”, con los BTS en las pantallas, y como anticipo de la intervención del coreano Jin el viernes.
El primer recital (y los que vendrán) tienen a H.E.R. y a Zoe Gotusso como teloneras, pero hubo más, ya que ambas cantantes cantaron con Martin.
La primera frase del cantante bien podría haber sido la última: “Buenas noches, mi familia argentina”, resume el clima vivido en el Monumental, coronado con fuegos artificiales de bajo impacto ecológico. Y eso fue sólo el comienzo...