El Gobierno decidió remover a la cúpula de la comisaría de Trancas, tras la muerte de una joven en esa localidad. Una joven tranqueña se había presentado en esa dependencia oficial para denunciar a su pareja y solicitar protección ante hechos de violencia, procedimiento que no habría podido concretar.
El jefe de la Unidad Regional Norte (URN), Joaquín Girvau Olleta, confirmó que la medida adoptada por el Ministerio de Seguridad y la Policía afectará a cinco agentes, luego del fallecimiento de la mujer.
El comisario, en una rueda de prensa, afirmó que se inició una investigación administrativa para determinar la responsabilidad del personal de esa comisaría por el suicidio de Noelia Soledad Sosa, de 30 años. El área Asuntos Internos de la fuerza de seguridad estará a cargo de la pesquisa.
“El policía tiene que tomar toda la denuncia. Cualquier policía, oficiales, jefes, deben tomar la denuncia”, enfatizó.
A la vez, el oficial aclaró que “la justicia determinará si hubo o no negligencia” en un proceso penal.
Por su parte, el jefe de Policía, Julio Fernández, afirmó que en la fuerza se aplica un protocolo en caso de violencia de género. En esa línea, remarcó que las denuncias se pueden realizar en “las comisarías y la línea telefónica 104”.
“A la par, está la OVD (Oficina de Violencia Doméstica) que pertenece al Poder Judicial (PJ), donde se recibe la denuncia por violencia en la familia”, expresó.
Sobre el hecho, ratificó el procedimiento interno para determinar la responsabilidad del personal policial de Trancas en la muerte de Sosa.