“Todo fue en cuestión de segundos. Lo que parecía un accidente típico de esta avenida, se transformó en un infierno de llamas, corridas y pedidos desesperados de auxilio”, explicó María Laura Rodríguez, una biker que dejó de hacer su rutina diaria para observar la escena. Una motocicleta y un auto terminaron totalmente consumidos por el fuego después de que se registrara un accidente en la avenida Presidente Perón, de Yerba Buena.
Ayer, pasadas las 13, en la esquina de la Perón y Malvinas Argentinas, por razones que no están esclarecidas, chocaron el Fiat Palio que era conducido por Iván Quiroga y la motocicleta en la que se trasladaba Gustavo Fernández. Por el impacto, el rodado de menor porte salió despedido y terminó impactando con un Ford que estaba estacionado en la avenida, propiedad de Gonzalo Eugenio Sánchez.
“En principio pensamos que era un accidente más de los que se registran en esta arteria. La escena siempre es la misma. Un conductor aterrorizado y un motociclista tirado en el pavimento quejándose de dolor”, aseguró Juan Pedro Pedroti. “Pero a los pocos minutos vimos que a la moto le comenzó a salir humo y después llamas. Cuando quisimos reaccionar, el fuego ya se había expandido al auto que no tuvo nada que ver en el accidente”, agregó en una entrevista con LA GACETA.
“Los bomberos voluntarios de Yerba Buena llegaron a los pocos minutos y pudieron extinguir las llamas, después de que vecinos, policías y vigías no habían logrado apagar el fuego. Por suerte no hubo ninguna explosión, porque hubiera sido mucho más grave. Pobre el hombre del auto que terminó incendiado totalmente. La ligó de arriba, terminó con el auto destruido sin haber participado en el percance”, sostuvo la ciclista Rodríguez.
El motociclista fue trasladado hasta el Centro Asistencial Ramón Carrillo, donde fue atendido de las lesiones que sufrió. Por decisión de sus familiares fue derivado luego a una clínica especializada en traumatología. “Cuando descubrí la moto y el auto incendiado me imaginé lo peor, pero después mi esposo me contó que no había pasado nada grave. Lo que no deja de preocuparme lo peligrosa que se transformó esta avenida”, finalizó Martina Fernández.