‘La depresión no es una reacción normal a una situación difícil de la vida; no es sólo estar triste; tampoco es una cuestión de carácter o de poca fortaleza; y, sobre todo, no es una elección. La depresión es una enfermedad generalmente influenciada por determinantes de tipo biológico, psicológico, social o emergente. La afirmación fue realizada por destacados especialistas en el marco del Septiembre amarillo, instaurado por la Organización Mundial de la Salud como el mes para la prevención del suicidio y, particularmente, el 10, Día Mundial de la Prevención del Suicidio.

Bajo la denominación Busca el sol y los hashtags #LaDepresiónTePasayPasa y #Depresiónsinestigma, la campaña busca visibilizar todos aquellos determinantes que pueden causar depresión y provocar un suicidio, y trabajar sobre ellos para dejar en claro que la depresión se trata y tiene cura.

De acuerdo con cifras de la propia OMS, la depresión es la principal causa de problemas de salud y de discapacidad a nivel global y, según las últimas cifras reportadas, se estima que más de 300 millones de personas viven con esta enfermedad en el mundo.

En la Argentina, un estudio epidemiológico realizado en 2018, del que participaron la Facultad de Medicina de la UBA y las universidades de California y de Harvard, con un total de 4.000 personas de 18 años y más, mostró que el 9% de los mayores de 18 (prácticamente uno de cada 10) presentarán un trastorno depresivo mayor en algún momento de su vida. Los datos epidemiológicos señalan que en 2020 unas 2.900 personas perdieron la vida por muerte autoprovocada, de los cuales poco más de 2.300 eran varones. La franja etaria de 20 a 24 años es la que mayor cantidad de fallecimientos concentró.

“La salud mental continúa estando estigmatizada, fundamentalmente por la ignorancia; las personas tienen ideas distorsionadas respecto de las razones que motivan que alguien desarrolle un cuadro depresivo, por ejemplo. Esto se traduce en una gran cantidad de prejuicios: se cree que es una cuestión de voluntad, se le dice 'ponete la pilas', 'salí a tomar sol y hacé ejercicio”. Hay que comprender que existen determinantes complejos para el desarrollo de esta enfermedad, se trata de una trama compleja de interacción de factores biológicos, genéticos, psicológicos y medioambientales que llevan a la depresión”, subrayó el doctor Marcelo Cetkovich, psiquiatra y vicepresidente de la Asociación Argentina de Psiquiatras.

“La depresión es una enfermedad que afecta el ánimo, la concentración, la capacidad de disfrutar, la voluntad y la energía. Muchas veces, la sociedad en general considera que una persona que está deprimida podría salir adelante simplemente ‘con voluntad’ y esto no es así, porque –justamente- la depresión es ‘la’ enfermedad de la voluntad y energía. Ambas están afectadas. Esto, a su vez, provoca pensamientos negativos acerca de uno mismo y de las decisiones que se toman, por lo que la persona se siente insegura y tiende a aislarse”, agregó la doctora Teresa Torralva, psicóloga, doctora en Medicina y jefa de Neuropsicología de la Fundación Ineco.

Cursar una depresión incrementa el riesgo de desarrollar otras problemáticas de gran impacto a nivel de la salud, como el consumo abusivo de sustancias o condiciones crónicas como una enfermedad cardiovascular. Por esto, los especialistas destacan la importancia de estar atentos a los determinantes que pueden favorecen la aparición de la depresión.

Septiembre amarillo
Campaña internacional

La campaña ‘Septiembre Amarillo’ - ‘Busca el Sol’ es una iniciativa de la OMS que cuenta con el auspicio de la Fundación Ineco, del laboratorio Pfizer y de la División Upjohn de Pfizer.

El nombre fue instituido desde 1994 en homenaje a Mike Emme, un joven estadounidense de 17 años que se quitó la vida en un momento de profunda desesperación.

Sus padres eligieron ese color porque era el mismo del que había pintado su auto Ford Mustang 1968, que había restaurado. Esa página web cuenta con información detallada acerca de la iniciativa e información importante para el público en general.