En la campaña 2022 se evaluó el comportamiento sanitario de las macroparcelas de variedades de poroto sembradas en las localidades de Nueva Esperanza (Establecimiento La Media Luna) y Las Cejas (Establecimiento Coromama). La docente de la Facultad de Agronomía y Zootecnia de la Universidad Nacional de Tucumán Cecilia Jalil presentó un informe sobre enfermedades de este cultivo durante la 1ª Jornada sobre Variedades y Manejo de Poroto para Tucumán y zonas de influencia, que organizó la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc).

“En Nueva Esperanza se observó pérdida de plantas al inicio del cultivo, asociada a la podredumbre carbonosa producida por el hongo Macrophomina phaseolina, favorecida por las elevadas temperaturas y por la falta de agua que sufrió el cultivo en su arranque. A los 40 días, cuando las variedades se encontraban entre R5 y R6, se cuantificaron niveles iniciales de severidad promedio de 0% a un 3% de bacteriosis común, producida por Xanthomonas axonopodispv.phaseoli, y de 0% a un 3,5% para mustia hilachosa, causada por el hongo Rhizoctonia solani/Thanatephorus cucumeris, determinándose un comportamiento diferencial de las variedades frente a estas patologías”, contó la docente.

Añadió que, sin embargo, a los 75 días (R7-R8) se observó un marcado avance de estas, y Leales 24 fue la variedad más susceptible, con valores finales de severidad promedio de un 38% y 35% para bacteriosis común y mustia hilachosa, respectivamente, en contraste con TUIUIU que manifestó los menores valores para ambas enfermedades que rondaron un 7%. “Las restantes variedades de poroto negro presentaron un comportamiento intermedio para las patologías prevalentes. Respecto a los porotos blancos, Cachucheño y PF1 fueron los más susceptibles, al igual que las variedades de color rojo Americano y Leales R4, mientras que Cranberry presentó un muy buen comportamiento a ambas enfermedades”, dijo Además, contó que se observaron síntomas aislados de antracnosis (Colletotrichum lindemuthianum) y de mosaico dorado (Bean golden mosaic virus o BGMV), mientras que algunas variedades fueron más susceptibles a sufrir fitotoxicidad asociada a las aplicaciones de mantenimiento realizadas en el cultivo.

En Las Cejas, las enfermedades prevalentes en la presente campaña fueron también bacteriosis común y mustia hilachosa; y nuevamente Leales 24 fue la variedad más afectada dentro de los porotos negros, Cachucheño para los blancos, y Americano para los rojos.

En otras localidades de la zona productora de poroto se constató que estas dos patologías predominaron en la presente campaña, a excepción de la localidad de La Virginia, donde la mancha angular -producida por Pseudocercospora griseola- se presentó con niveles elevados de severidad -por arriba de un 40%-, y en Rosario de la Frontera se constató la presencia de esta enfermedad, pero con promedio de severidad más bajo: 5%.

Estrategias

Entre las estrategias de manejo de las enfermedades foliares más importantes del cultivo, mediante estudios previos realizados en campañas anteriores, se pudieron determinar aquellas condiciones ambientales que determinaron y explicaron la ocurrencia de las distintas patologías. Conocer estos aspectos, en conjunto a la aplicación de diferentes estrategias que tiendan a manejar la forma en que estos patógenos sobreviven de un año otro -por ejemplo, la rotación de cultivos o el uso de semilla sana y certificada-, en conjunto al monitoreo y la aplicación de productos químicos específicos, la elección de las variedades de mejor comportamiento y el empleo de inductores de defensa y productos antiestrés -alternativas de manejo complementarias-, permitirán disminuir el impacto negativo de las enfermedades en un cultivo de importancia regional como es el poroto.