En la oposición persisten las críticas respecto al reparto discrecional de más de $8.000 millones de fondos no reintegrables que realizó la Provincia y que benefició casi en su totalidad a municipios del mismo signo político. El diputado Domingo Amaya (JxC) se sumó a los cuestionamientos por los criterios de distribución de estas asistencias. “La plata que se distribuye no es de quien gobierna”, dijo en una entrevista con “Buen Día”, el informativo de LG Play.
Según investigó LA GACETA, el distrito más favorecido en el primer semestre de 2022 con estas asistencias fue el municipio de Banda del Río Salí, que administra el jaldista Darío Monteros. Se giraron casi $1.800 millones.
Amaya, en ese sentido, embistió contra el intendente bandeño y Osvaldo Jaldo, aunque sin mencionarlos. “Cuando uno gobierna, lo hace para todos. Los subsidios deben ser distribuidos entre las personas que verdaderamente necesitan y no a aquel que ha trabajado políticamente para el que ha ganado. Esa inequidad por ser ladero político o amigo no debería existir”, remarcó.
Amaya también recordó un viejo planteo ante Nación para reformular la ley de coparticipación. “Lo importante es que ese dinero genere trabajo. El problema hoy es que no se destina a eso”, aseguró.