Tres de los cuatro intendentes opositores en la provincia volvieron a la Casa de Gobierno esta mañana. Mariano Campero (Yerba Buena), Alejandro Molinuevo (Concepción) y Sebastián Salazar (Bella Vista) se reunieron con el gobernador interino, Osvaldo Jaldo, en medio de la polémica por los criterios que aplica el Gobierno provincial para distribuir fondos no reintegrables entre los distintos distritos.
En la previa del encuentro, en la oposición habían acusado al Poder Ejecutivo (PE) de “discriminar” a los municipios de Juntos por el Cambio (JxC) y favorecer a los intendentes oficialistas, en particular, a Darío Monteros (Banda del Río Salí).
Tras el encuentro, sin embargo, los intendentes opositores destacaron el diálogo con el mandatario provincial, con el fin de llevar adelante el “trabajo conjunto entre la Provincia y los municipios para avanzar con acciones comunitarias conjuntas”.
“La forma de solucionar muchas veces las discusiones que se han dado, sobre todo en términos públicos, es con el diálogo. Y nosotros tenemos vocación y voluntad de diálogo. Le transmitimos al Gobernador que el día que seamos gobierno, haremos lo mismo con los intendentes”, expresó Campero.
El intendente de la "Ciudad Jardín" agradeció a Jaldo la posibilidad de charlar “porque reconozco que cuando se trabaja de manera coordinada Nación, Provincia y Municipio, el resultado es muy favorable para los vecinos”.
Campero aclaró que no pidieron fondos no reintegrables, sino que se plantearon "distintos temas, tanto los que tienen que ver con la provincia como la situación de nuestros municipios".
El intendente de Yerba Buena sostuvo que la predisposición es mutua entre intendentes y Gobernador: “buscamos dar continuidad al diálogo para solucionar los problemas de los vecinos. Lo que vale es lo que uno puede gestionar para su ciudad; mejorar el alumbrado, la recolección de residuos, el alumbrado y la seguridad. La forma de sacar a Tucumán adelante es mediante el diálogo, sin intermediarios. Seguramente vamos a tener más reuniones”, enfatizó.
Salazar, sin hacer alusión al intendente de la capital, Germán Alfaro, dijo: “esta reunión es una continuación del primer encuentro que tuvimos hace más 20 días con el presidente del partido de la Unión Cívica Radical (-UCR-, Roberto Sánchez). La hicimos con los tres intendentes radicales de ciudades que están dentro del Pacto Social”.
“Hago eco a las palabras de otros intendentes que no son de nuestro color político. Es importante en algún momento dar una discusión seria sobre una nueva Ley de Coparticipación, de acuerdo a un mandamiento de la Constitución Provincial, que habla de la autarquía de los municipios. Es una discusión que se tiene que dar en la Legislatura”, expresó con respecto al Pacto Social.
En la línea de Campero, Salazar indicó que “la reunión ha sido una avance". "Manifestamos nuestras necesidades. Hablamos del impacto de la inflación. Seguramente es un reclamo que hacen todos los intendentes”, añadió.
A su turno, Molinuevo sostuvo: “Concepción vino trabajando de manera austera. El diálogo siempre es bueno. Desde el inicio de mi gestión en diciembre, el Gobernador fue dos veces a Concepción y yo también vine a Casa de Gobierno. Hablamos de la crisis que tenemos en el país y de cómo impacta en los municipios. Quedamos en seguir conversando, afrontar juntos la crisis y evitar poner en riesgo a nuestros vecinos con cuestiones que afecten la paz social”.
“Estamos agradecidos por la recepción e invitamos al Gobernador a nuestras ciudades. La gente está cansada de las peleas entre los dirigentes y nosotros queremos demostrar que se puede dialogar. Jaldo nos abrió las puertas, vino a Concepción a entregar escrituras públicas. Esto habla bien de la relación a nivel institucional”, finalizó.