Una mujer fue condenada en Tucumán a través de un juicio abreviado celebrado este viernes, en el marco de una causa por robo, y además de recibir una pena condicional de un año, deberá cumplir con una serie de reglas de conducta. Entre ellas, se le impuso la obligación de aprender y ejercer algún oficio.
El Ministerio Público Fiscal (MPF), con visto bueno de las víctimas, arribó a un acuerdo de juicio abreviado con la defensa de la imputada, a quien se la sentenció por considerarla coautora penalmente responsable del delito de robo simple en concurso real de encubrimiento por receptación dolosa agravada por el ánimo de lucro.
El hecho se produjo el 7 de enero pasado. Cerca de las 20, la imputada y su cómplice -que ya había sido condenada en una audiencia anterior- se presentaron en el casa de la víctima ubicada en calle Santiago del Estero al 2.000.
Luego de compartir la cena y de ingerir bebidas alcohólicas, el dueño de casa comenzó a sentirse mareado, por lo que las delincuentes aprovecharon la situación: le ataron la manos con un trapo de piso y lo "desvalijaron".
El listado de bienes robados incluye $50.000 en efectivo, un estéreo, una filmadora, un soldador, un equipo de música, una licuadora, numerosas prendas de vestir, un reloj pulsera, una riñonera, un secador de pelo, varios perfumes y dos celulares.
El 2 de abril, cerca de las 16.30, la imputada realizó una publicación en un grupo de compraventa en la red social Facebook, donde ofertaba celulares que su cómplice le facilitaba para su venta, detalla el informe del MPF. Y este posteo permitió que los investigadores la encontraran.
Audiencia clave
En la audiencia celebrada este viernes participó la auxiliar de fiscal María José Agüero, en representación de la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos II, que conduce Pedro León Gallo. La investigadora fue la encargada de describir los términos del acuerdo, que fue aprobado por la Justicia penal.
Las partes pactaron la pena de un año de prisión de cumplimiento condicional, detalla el reporte del MPF.
Además, la mujer deberá cumplir con reglas de conducta, entre ellas: fijar residencia en la provincia, prohibición de ingerir bebidas alcohólicas, una restricción de acercamiento a la víctima y la obligación de aprender y ejercer algún oficio.