El Gobierno Nacional confirmó que Sergio Massa será quien estará a cargo del superministerio que reúne a Economía, Desarrollo Productivo y Agricultura. En ese contexto, comenzaron a definirse otros cambios en otras áreas del Gobierno.
En primer lugar, luego de tres semanas cumpliendo su función como ministra de Economía, Alberto Fernández designó a Silvina Batakis como presidenta del Banco Nación. La noticia la confirmó el Gobierno a través de un comunicado que indicaba: “El presidente reconoce y agradece el compromiso que demostró al sumarse al Gabinete”.
Asimismo, Mercedes Marcó del Pont será la nueva secretaria de Asuntos Estratégicos tras la renuncia de Gustavo Béliz al cargo.
A su vez, dejó su puesto como titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), el cual será reemplazado por Carlos Castagneto, actual Director General de Recursos de Seguridad Social del organismo recaudador.
Por su parte, Daniel Scioli volverá a ocupar su cargo como embajador argentino en Brasil, luego de haber asumido como ministro de Desarrollo Productivo el 15 de junio pasado tras la renuncia de Matías Kulfas.
“A pedido del Presidente Alberto Fernández, Daniel Scioli volverá a la embajada argentina en Brasil, donde realizó un excelente trabajo. El presidente le agradece profundamente haber estado presente en el gabinete cuando fue convocado”, indicaba el comunicado oficial.
Además, tras la llegada de Sergio Massa al Gabinete, Julián Domínguez presentó su renuncia al Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, la cual el presidente Alberto Fernández aceptó.
Finalmente, resta saber qué sucederá con el reemplazo de Sergio Massa como presidente de la Cámara de Diputados. El nuevo superministro, presentará su renuncia que deberá ser aceptada por sus pares en una sesión que se llevará a cabo el miércoles próximo.
Lo que se sabe, es que la diputada Cecilia Moureau sería la nueva presidenta de la Cámara Baja. Además, el movimiento de fichas puede continuar. También resta definir si habrá cambios en Energía, un área clave bajo control de la vicepresidenta, y en el Banco Central, con Miguel Pesce a la cabeza.
Así, Massa llega con un poder inédito. De hecho, no reportará al jefe de Gabinete, Juan Manzur, sino que dialogará de manera directa con Alberto Fernández y Cristina Kirchner, con quienes negoció durante semanas el alcance de su desembarco.