Dadas las oportunidades del mercado vacuno local, la disponibilidad de terreno apto y la capacidad instalada para la producción de alimento para animales, no había obstáculo para la inclusión de un emprendimiento de engorde a corral en la cadena productiva de Trigotuc. En el predio destinado a tal finalidad, ubicado en Isca Yacu, se hospedan hasta 15.000 cabezas de ganado vacuno de encierre instantáneo, destinadas a ganar hasta 200 kilos durante su estadía en este feedlot a cielo abierto.

En su dieta se incluirá la burlanda derivada de la producción de bioetanol, más el aporte de fibra mediante el forraje que se elabora en instalaciones propias y que incluye un picado de sorgo y de maíz tempranos, que conservan humedad. En el engorde a corral se consumen entre 160 y 170 toneladas de alimento, de las cuales entre 50 y 60 toneladas corresponden a la burlanda.

“Nuestros corrales no huelen mal. Esto se debe a que en lugar de la dieta seca, que produce acidosis y mal olor, alimentamos a los animales con dieta húmeda, basada en la burlanda que sale de la destilería, más sorgo y maíz picado antes de que llegue a grano, además del expeller de soja”, dijo Manuel Barinaga.

En cuanto a la producción avícola propia de genética de calidad, Molino Trigotuc posee una planta de incubación de huevo fértil que produce 360.000 pollitos “bb”, vacunados in ovo al momento de la trasferencia a nacedoras, lo que resulta en un eficiente resultado en la salubridad inicial del pollito para que sea entregado a granjas de engorde; esto asegura sanidad y rendimiento a la oferta final.

La planta destinada a la incubación tiene capacidad de producción de hasta 4,5 millones de pollos “bb” por año, de los cuales un millón se destina a la planta de engorde propia. En Campo Cañete, la empresa también cuenta con una granja de engorde de ocho galpones que alojan 20.000 pollos cada uno y una ampliación de seis galpones de 30.000 pollos cada uno.