La Federación Internacional de Natación (FINA) sancionó este domingo una nueva política que impide que la nadadoras transgénero que hayan completado su transición después de la pubertad puedan participar de las pruebas femeninas. En ese sentido, se procederá a crear una nueva categoría “abierta” sin distinción de géneros para que puedan ser incluidas en las competencias.

En el Congreso que se desarrolló este fin de semana en Budapest, Hungría, se aprobó esta nueva política con un 71,5% de los votos, según informó la FINA en un comunicado oficial. La votación se llevó a cabo luego de escuchar los argumentos de un grupo de trabajo conformado por tres áreas distintas: atletas, médicos y científicos, legales y derechos humanos.

El documento aprobado explica que las nadadoras transgénero deberán demostrar antes las autoridades de la FINA que completaron su transición antes de la pubertad o de los 12 años para poder ser elegibles en las categorías femeninas. De lo contrario, no podrán competir en esas pruebas.

La creación de la nueva categoría “abierta” implicará la apertura de un nuevo grupo de trabajo que durante los próximos seis meses se encargará de estudiar la mejor manera de ponerla en práctica.

“Tenemos que proteger los derechos de nuestros atletas a competir, pero también debemos proteger la justicia en cuanto a la competencia en nuestros eventos, especialmente en las categorías de mujeres”, dijo el kuwaití Husain Al-Musallam, presidente de la FINA.

El dirigente aseguró que la creación de una categoría “abierta” significará que “cualquier persona tendrá la oportunidad de competir en el alto rendimiento”.

“Esto no se ha hecho nunca, la FINA tendrá que marcar el camino. Quiero que todos los atletas se sientan incluidos y que puedan desarrollar ideas durante este proceso”, agregó sobre esta nueva medida que tiene efecto de aplicación inmediato sobre todas las competencias organizadas por la entidad.