“Nuestras embajadas en todo el mundo despliegan una agenda muy intensa respecto de la cuestión Malvinas. El objetivo es llamar la atención respecto de que este año se están cumpliendo no sólo los 40 años de una guerra. También estamos evidenciando que durante cuatro décadas la reticencia británica ha implicada una clara violación del derecho internacional”. La afirmación corresponde a Guillermo Carmona, secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur del Ministerio de Relaciones Exteriores de la Nación.
El ex diputado nacional visitó Tucumán para brindar una conferencia en la Legislatura. (Se informa por separado). Consultado por LA GACETA, expuso cuáles son las expectativas oficiales respecto de las negociaciones sobre la soberanía de nuestro país en el archipiélago austral.
Perspectivas
“Sabemos que hay reticencia de parte del Reino Unido respecto de volver a entablar negociaciones. Eso es ampliamente conocido. Pero también tiene un costo para la reputación del Reino Unido. De hecho, sostener un régimen colonial a 14.000 kilómetros de Londres también les genera un ruido interno”, puntualizó.
“Nuestra perspectiva parte de la necesidad de trabajar en función de determinadas condiciones. La primera es la insistencia argentina frente a la reticencia británica. La segunda condición es que la Argentina debe consolidar sus posiciones soberanas en el Atlántico Sur y en la Antártida en las áreas que no están discutidas con el Reino Unido. Esta es una condición de credibilidad muy importante”, enumeró Carmona.
“La tercera condición es seguir sumando apoyos internacionales. Esta es una tarea permanente que lleva adelante la Cancillería y se exhiben avances muy significativos al respecto. La cuarta condición consiste en aprovechar las oportunidades que brinde el escenario internacional para achicar el margen de sintomática reticencia del Reino Unido”, precisó.
Escenarios
Carmona considera que el escenario internacional actual, al que define como “cambiante”, es favorable para el reclamo argentino de sus derechos sobre las islas Malvinas.
“Es evidente que las tensiones internacionales se manifiestan en los mares. Esto ya se daba antes incluso de la guerra en Ucrania. Y cuando se mira ahora lo que ocurre allí se advierte que hay una fuerte lucha por el control de los mares y los puertos. Lo cual ratifica que las apuestas estratégicas tienen que ver con los mares”, define.
“Eso lleva a pensar cuál es la posición de la Argentina y de América Latina en el Atlántico Sur. En ese punto, creo que lejos de ser una garantía para las potencias mundiales, la presencia británica es disruptiva en el Atlántico Sur y genera tensiones”, afirma el diplomático.
“Se trata de una presencia militar que preocupa no sólo a la Argentina, sino también a otros países de la Región que integran la Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur. Este es un mecanismo creado a partir de una resolución de Naciones Unidas que comparten los países sudamericanos y los países africanos con costas en el Atlántico Sur. Y el objetivo, como el nombre lo indica, es que sea una zona de paz y cooperación, libre de los conflictos internacionales”, subrayó.
Principios
El conflicto detonado en Europa a partir de la invasión de Rusia a Ucrania ha puesto sobre el tapete internacional otro elemento que, a criterio de Carmona, fortalece la reivindicación argentina sobre Malvinas.
“La guerra en Ucrania ha llevado a que se hable con mucha fuerza de la importancia de la integridad territorial. Ese principio juega muy a favor de la Argentina y deja expuesta la doble vara de muchas potencias occidentales. Tanto el Reino Unido como la Argentina se han manifestado en favor de la integridad territorial de Ucrania, y nuestra Cancillería dejó en evidencia que el Reino Unido viola la integridad territorial argentina desde hace 189 años”, concluyó.
Acciones oficiales para una política de Estado
La Nación promueve una “Agenda Malvinas”
“Me invitaron a hablar sobre la política que lleva adelante la Argentina en el marco de la cuestión Malvinas. Fue una oportunidad, también, para compartir información acerca de lo que hace en el plano nacional e internacional”, puntualizó Guillermo Carmona. El secretario de Malvinas de la Cancillería brindó en la Legislatura la conferencia “Malvinas nos une. 40 aniversario de la gesta”, organizada por el legislador Raúl Albarracín, titular de la bancada del Partido de la Justicia Social.
“Este año se están cumpliendo 40 años del conflicto del Atlántico Sur y en ese marco desde el Gobierno nacional promovimos lo que se llama la ‘Agenda Malvinas 40 años’, se convocó a la mesa interministerial que componen todas las carteras del Poder Ejecutivo Nacional, y se convocó también a una mesa interprovincial, que nos ha permitido coordinar acciones. Esto tiene que ver con el objetivo de visibilizar la cuestión Malvinas como una política de estado, como una causa nacional. Y tiene que ver también con la decisión de hacerlo de manera federal, con el conjunto de las provincias. El reconocimiento a los veteranos y veteranas de Malvinas, y los homenajes a los caídos en la guerra, tiene un lugar muy destacado en esta agenda”, detalló.
“Enfatizamos la importancia de que Malvinas se considere una política de Estado también en el marco de la Constitución, en su cláusula transitoria primera. El Gobierno, con la creación del Consejo Nacional de Asuntos relativos a Malvinas, gestó un ámbito plural, integrado por académicos, opositores, representantes de Tierra del Fuego y veteranos, para darle contenido a esa política de Estado”, concluyó.