Cuando en el inicio de la jugada Iván Maggi trastabilló en mitad de cancha, por su cabeza, en una milésima de segundo, corrió una premonición. Ahí nomás, tras ese flash, Juan Miritello volvió en sí y corrió hacia la pelota; abrió hacia la derecha para Diego Sosa y salió como una exhalación hacia el área enemiga. El centro-pase del ex Argentinos fue un puñal envenenado para la defensa de Tristán Suárez, pero “Miri” hizo un aporte clave: diagonal hacia adelante y afuera para dejar fuera de combate al arquero, y definición con los dos pies para adelante. “Es un poco de intuición. Intento adivinar dónde va a caer la pelota y trato de ir a buscarla. Es estar ahí para aprovechar la oportunidad que se presenta”, dice el “9 picante” de La Ciudadela.

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Miritello muestra sus credenciales partido a partido. Aporta sacrificio, colabora en el armado de juego como le gusta a Pablo De Muner, pero tiene también lo que debe tener un centrodelantero: está siempre bien ubicado para transformar en situación de gol cualquier pelota que le pasa cerca. “Hay veces que durante un partido no te toca participar mucho del juego. Por eso me mentalizo en que si tengo una chance la debo aprovechar al máximo”, explica quien le puso el broche de oro a una jugada que, según sus palabras, fue un producto del trabajo de laboratorio de su entrenador. “Son jugadas que se entrenan, se ensayan en la semana. Por eso salen así. Diego me puso un pase perfecto y yo pude llegar a conectarlo. Fue un gol muy lindo”.

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Lleva seis goles, idéntica marca que Pablo Vegetti el goleador del líder Belgrano y uno de los delanteros más cotizados de la Primera Nacional; y está a tan sólo uno del máximo artillero del campeonato: Enzo Díaz, de Ferro. Y sí bien eso lo pone feliz, tampoco le nubla el horizonte. “Me pone muy contento sumar en lo personal y sobre todo aportar para que el equipo siga sumando y haya podido volver a ganar. Pero tengo los pies sobre la tierra y trato de escuchar los consejos y de trabajar para seguir creciendo como futbolista”, dice, no pudiendo ocultar su alegría por un presente que le brilla; igual que esa sonrisa amplia que él entrega en el diálogo con los periodistas. “Me preparo para ayudar al equipo en cada partido. Gracias a Dios me está tocando convertir. Es una alegría enorme poder hacerlo. Pero hay que seguir”, sentencia el hombre-gol de Bolívar y Pellegrini. Ese que ya demostró que puede generarse situaciones solo; pero que mejor alimentado, puede transformarse en un delantero clave en la recta final del campeonato. Sí; porque tiene el arco entre ceja y ceja y siempre está listo para empujarla al gol.

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“Silenzio Stampa”

Pablo De Muner volvió a suspender una conferencia de prensa, al igual que lo había hecho entre semana. El DT no le avisó ni a la prensa del club los motivos de su decisión.

Sólo un susto

Juan Orellana había terminado el partido casi sin poder caminar. Pero los estudios llevaron tranquilidad. “No hay fractura. Tiene traumatismo en la tibia derecha, con contusión muscular”, dijo el doctor Demetrio López Araujo.

Más obras

La CD firmó un contrato con la empresa Tensolite para emparejar y ampliar la tribuna de calle Rondeau. Se reemplazarán 28 escalones y se agregarán 8. Además, armarán una estructura metálica, por detrás de la tribuna, para la pantalla gigante.