El Ministerio de Trabajo de la Nación decidió extender por cinco días más la conciliación obligatoria, ante la falta de un acuerdo con la Unión de Tranviarios Automotor (UTA), por lo que el paro anunciado para mañana queda en suspenso.
La medida de fuerza había sido convocada por 72 horas, comenzando mañana y hasta el jueves, en el marco de un reclamo salarial con empresarios del interior del país.
En un comunicado donde confirma el acatamiento de la conciliación obligatoria, UTA sostuvo que "ratificando el pedido salarial efectuado, informamos que de no conseguir la firma del acuerdo salarial para los Trabajadores del Transporte de Pasajeros de Corta y Media Distancia del Interior del País, una vez concluido el periodo de paz social resuelto, retomaremos las medidas de acción sindical, con más fuerza que nunca. El salario no se negocia".
Lo que reclama UTA es que los trabajadores de las provincias perciban idéntico incremento salarial que el otorgado a los choferes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). El objetivo es que el sueldo básico de los choferes de transporte sea de $150.000.
Con este panorama, los plazos para llegar a un acuerdo se extienden hasta la semana que viene. En caso de que los resultados de las negociaciones sean negativos, el paro se llevaría adelante a partir del martes.