Un hombre fue condenado este jueves por la Justicia provincial a cinco años de prisión efectiva, luego de un juicio abreviado por robo agravado celebrado por el fuero penal.
El Ministerio Público Fiscal (MPF) había requerido la audiencia a las partes, con el fin de tratar ante el juez penal Diego Lammoglia la propuesta de pena acordada en forma conjunta con la víctima y la defensa del imputado.
Hizo un boquete y robó; pero terminó detenidoLa causa fue investigada por la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos II, a cargo de Pedro Gallo. Según la hipótesis del caso, el 11 de diciembre del año pasado, cerca de las 16, la víctima se encontraba solo en la puerta de su casa, en Alderetes, tomando una cerveza, cuando llegó su sobrino, identificado como Héctor Isaías Cajal (25) y pidió que le diera $200.
El hombre le respondió que no tenía dinero. Ante esto, el imputado sacó de su cintura una punta, se la exhibió de manera intimidatoria y le manifestó que “no se haga el piola”, robándole un teléfono que estaba sobre una silla, señala el informe del MPF.
De acuerdo a la denuncia de la víctima, en un momento su sobrino lo amedrentó diciéndole que si no le daba la plata lo iba a matar. Si bien no lo lastimó, el acusado, que estaba tomando alcohol etílico, le roció la cara y parte del pecho, y lo amenazó con prenderle fuego, agrega el reporte oficial.
Imputaron a dos jóvenes implicados en el robo de más de $ 1 millónDurante esta audiencia, el auxiliar de fiscal Rodrigo Bilbao describió detalladamente los puntos del convenio. Tras relatar cómo sucedió el hecho, el representante del MPF presentó las evidencias reunidas para probarlo y sostuvo que la calificación legal endilgada es la de robo agravado por el empleado de arma blanca, en calidad de autor. En este sentido, indicó que la pena pactada entre las partes es la de cinco años de prisión efectiva, más accesorias legales y costas procesales.
Prisión condicional para un delincuente que robó un celular en la plaza BelgranoEl juez declaró admisible el acuerdo pleno de juicio abreviado y ordenó el traslado de Cajal al penal de Villa Urquiza o, en el caso de que esta unidad no disponga de cupo, deberá ser alojado en un espacio que garantice las condiciones de seguridad y salubridad.