Mientras los inversionistas celebraban la detención de cuatro ejecutivos de Adhemar Capital (AC), los empleados de la firma de nuestra provincia recibían la información de que la sucursal de la financiera en nuestra provincia cerraba sus puertas. “Nos dijeron que nos quedábamos sin trabajo porque finalizaban las operaciones en la provincia”, indicó uno de los nueve trabajadores que prestaban servicio en la empresa.

Esa fue la confirmación de lo que se veía venir desde hace varios días. AC abrió sus puertas por última vez el martes 12 de abril. Al día siguiente, no hubo actividad porque, según se informó, desinfectaron el local. Luego vino Semana Santa y el lunes, cuando debía reiniciar la actividad, tampoco abrió. Ese día la empresa informó que por la enfermedad del CEO Edgar Adhemar Bacchiani suspendía sus actividades. Ayer anunció su cierre. “Todos los damnificados enviaremos cartas documentos para reclamar nuestros derechos”, explicó el empleado.

Adhemar inauguró su local de avenida Solano Vera primera cuadra. Según los informes a los que accedió LA GACETA, habrían cerrado más de 700 acuerdos, aunque no se puede determinar todavía cuántos son los inversionistas afectados, ya que los convenios eran unipersonales, pero intervenían varias personas. El abogado Alfredo Aydar, que representa a los ahorristas denunciantes, estimó que la empresa habría manejado unos U$S 600.000.

“Creo que ahora, cuando ya no hay qué esperar, la gente comenzará a denunciarlo. Antes no lo hicimos porque manteníamos la esperanza de que nos devolverían el dinero”, explicó M.N.A, un inversionista afectado.

Protección

Finalmente, Bacchiani fue detenido ayer por orden del juez federal Miguel Ángel Contreras en su casa de Catamarca. La misma situación corrieron José Blas y Franco Alexis Sarroca. Mientras que por la tarde, en su casa de Yerba Buena, fue arrestada Sofía Aylan, gerente de la empresa en nuestra provincia.

El magistrado argumentó su decisión porque los fiscales catamarqueños Santos Reynoso y Rafael Vehíls Ruiz habían aportado nuevos hechos e indicios que los ejecutivos podrían entorpecer la investigación o fugarse.

Los detenidos, según la resolución judicial, no terminarán en un calabozo, sino que cumplirán la medida con la modalidad de arresto domiciliario. Aclaró el magistrado que tomó esta decisión porque la integridad física de los cuatro acusados estaba en peligro. Desde el jueves que los señalados de haber realizado operaciones financieras sin autorización, estafa, lavado de activos y asociación ilícita fueron perseguidos por inversionistas que intentaban exigirle la devolución del dinero personalmente y algunos de ellos realizaron actos de vandalismo en contra de sus propiedades.

Aylan, viuda del primer socio de Bacchiani, no será trasladada a tierras catamarqueñas como se especuló en un primer momento. Recién lo hará el lunes, cuando preste declaración junto a los otros arrestados.

La detención de los cuatro ejecutivos trajo alivio a los otros cinco acusados en la causa: los tucumanos María Lihue Banega, Lucas Barrera Oro y los catamarqueños Héctor Rodolfo Sagripanti Orellana y Pablo Antonio Sosa. Al parecer, los funcionarios judiciales habrían determinado que ellos podrían haber tenido una responsabilidad mucho menor. Los cuatro declararán recién el jueves 28. No se tomó ninguna decisión en contra de la colombiana Savaire Celeste Garce Ruso, esposa del CEO de Adhemar.

Pelea

Ayer se produjo una situación insólita. Personal de Gendarmería Nacional le ganó de mano a una delegación de la policía de Córdoba que había viajado a Catamarca para detener a las mismas personas. Los efectivos habían llegado hasta esa provincia por un pedido de la fiscala Valeria Rissi que había conseguido que un juez de La Docta ordenara la detención de los cuatro ejecutivos. Según trascendió, no pudieron concretar la medida porque no podían ubicarlos.

Rissi está al frente del expediente por la denuncia que realizaron más de 20 inversionistas cordobeses en contra de los responsables de AC. Se negó al pedido que le hicieron sus pares catamarqueños para que desistiera de la competencia. El pleito interjurisdiccional será resuelto por la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

La fiscala no pudo aprehender a los ejecutivos, pero al menos, con autorización de un magistrado, realizó allanamientos en la casa de Bacchiani y en la casa central de Adhemar. Según consignaron medios catamarqueños, logró el secuestro de documentación que terminaría perjudicando a los sospechados. En Córdoba, los cuatro detenidos están acusados de estafas reiteradas y de integrar una asociación ilícita.

Más allá de las diferencias que existen, la investigación no se detendrá. En la mira hay otras personas que podrían estar involucradas y cuyos nombres se mantienen en reserva.