Afortunadamente fue solo un susto y no ocurrió una desgracia mayor. Ayer por la tarde, un desprendimiento de rocas del cerro, camino a los valles sobre la ruta 307, generó complicaciones en el tránsito vehicular, que presentaba un movimiento importante teniendo en cuenta el fin de semana largo por Semana Santa.

La caída de rocas se dio a 15 kilómetros de donde se encuentra ubicado el monumento de El Indio y se produjo a las 18.50. Un vehículo conducido por una señora fue rozado en la parte de atrás, a la altura de la chapa patente y sufrió una pequeña abolladura, sin que el incidente fuera más grave.

Según se informó, no hubo heridos. Pero el tránsito estuvo interrumpido por un lapso de una hora y, ante esto, se formaron largas filas de autos, sobre todo de aquellos que subían hacia los cerros. 

Los automovilistas colaboraron para despejar las rocas del camino y lograron su cometido, salvo con una de gran tamaño que no pudo ser desplazada de la ruta.

Por esa razón en la zona del accidente solo podía pasar un vehículo a la vez. Sin embargo, desde vialidad se informó que se trabajó durante la noche y el camino a Tafí del Valle ya se encuentra totalmente despejado para circular de manera normal.